Tras las protestas protagonizadas por comerciantes informales del casco central de Barquisimeto este fin de semana, ayer un grupo de buhoneros se agrupaba en la avenida 20, específicamente entre las calles 25 y 27, donde se notó la presencia reforzada de efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana, cuyo vocero principal prefirió no declarar, por no estar autorizado.
Por su parte, los buhoneros seguían exigiendo una respuesta inmediata por parte de los entes competentes, reuniendo firmas y documentos de cada comerciante informal, para hacérselos llegar a los representantes del gobierno municipal de Iribarren.
Más de 160 trabajadores de este sector estaban presentes en el lugar, desmintiendo informaciones sobre saqueos y robos que supuestamente habrían tenido lugar el pasado sábado, cuando varios de ellos evitaron que locales a lo largo de la 20 abrieran sus puertas en protesta a la negativa de los órganos de seguridad a dejarlos trabajar en la importante arteria vial.
Tras un recorrido de sólo un par de cuadras, fue posible observar un total de cuatro unidades y 18 motos de la GNB, así como tres vehículos de la Policía Municipal de lmunicipio Iribarren.
Vía telefónica Argenis Orellana, jefe de la División de Abastecimiento y Mercados de la Alcaldía de Iribarren, dio a conocer ayer en la tarde que se había sostenido un encuentro con los comerciantes informales para notificarles que podrían localizarse en las vías transversales a la avenida 20, estrictamente entre las calles 19 y 42, para seguir vendiendo.
“Cabe recordar que los organismos encargados de atender los asuntos de los buhoneros son el Plan 20, por parte de la GNB, y la Fundación Municipal de Economía Social (Fumdes) de Iribarren, liderada por César Pereira”, explicó.
Ante el desacuerdo expresado por varios miembros de la actividad buhoneril, Orellana recordó que el bulevar de la 20 está protegido por una ordenanza, añadiendo que a la comunidad de comerciantes informales se le había explicado lo perjudicial que podría resultar para ellos también adoptar una decisión diferente, a la vez que confirmó que ya se percibía una importante presencia de buhoneros en las calles 19 y 21 con avenidad 20.
Por otra parte, destacó la relevancia de permitirle a los compradores elegir entre dirigirse a los locales de la 20, o a los buhoneros en las calles transversales, añadiendo que es necesario diluir cualquier riesgo de alteración del orden público para asegurar a comerciantes y compradores navideños una experiencia de tranquilidad.
“La idea es pertubar lo menos posible a los transeúntes”, señaló.
Fotos: Jairo Nieto