Músicos y celebridades de México se pusieron de luto por Jenni Rivera, la cantante nacida en Estados Unidos que supuestamente murió en un accidente, cuya voz conmovedora y franqueza hacia sus problemas personales la convirtieron en una superestrella mexicana-estadounidense de la llamada música grupera.
Las autoridades no han confirmado su deceso, pero la familia de Rivera en Estados Unidos dijo que tenían pocas dudas de que iba en el avión Learjet 25 que se desintegró el domingo al estrellarse en una zona agreste del estado de Nuevo León en el noreste de México.
«Mi hijo Lupillo me dijo que efectivamente el avión de Jenni fue el que se accidentó y que todas las personas (a bordo) murieron», dijo el padre de la cantante, Pedro Rivera, ante decenas de periodistas que se aglomeraron frente a su casa en el área de Los Angeles.
También anunció que su hijo Lupillo viajará a Monterrey, capital de Nuevo León, en la madrugada del lunes para identicar los supuestos restos de la cantante.
«El cuerpo de mi hija creo que está irreconocible», indicó.
Los mensajes de condolencias surgieron abundantes entre diversas personalidades.
La cantante Lucero dijo en Twitter: «Qué terrible noticia. Que en paz descanse… Mi más sentido pésame para su familia y amigos. Luz», mientras que el jefe de gobierno de la capital mexicana, Miguel Ángel Mancera escribió: «Descanse en paz (at)jennirivera, mi pésame a familiares y amigos». Paulina Rubio, compañera de Rivera en el programa de televisión La Voz de México, expresó: «íAmiga! ¿Por qué? íNo hay consuelo, Dios mío ayúdame!»
Nacida en Long Beach, California, Rivera se encontraba en la cúspide de su carrera como la cantante más exitosa en el género grupero, un ambiente dominado por hombres e influido por los estilos norteño, cumbia y ranchero.
De 43 años, madres de cinco hijos y abuela de dos, Rivera _llamada la Diva de la Banda_ era conocida por su actitud franca hacia sus problemas para darle una buena vida a sus hijos pese a una serie de reveses.
Recientemente se divorció de su tercer esposo, fue detenida en un aeropuerto de la Ciudad de México con cientos de miles de dólares en efectivo y se disculpó públicamente debido a que su hermano atacó a su admirador ebrio que la insultó en 2011.
La franqueza sobre sus problemas personales le ganó el cariño de millones de personas en Estados Unidos y México.
Rivera vendió 15 millones de discos, y a últimas fechas ganó dos Premios Billboard a la Música Mexicana: Artista Femenina del año y Album de Banda del Año por «Joyas prestadas: Banda». Fue nominada a las preseas Latin Grammy en 2002, 2008 y 2011.
El secretario de Comunicaciones y Transportes de México, Gerardo Ruiz Esparza, dijo que «todo apunta» a que los restos del avión pertenecen a la aeronave en que viajaban Rivera y otras seis personas a la ciudad central de Toluca, cerca de la Ciudad de México, procedente de Monterrey, donde la cantante acaba de ofrecer un concierto.
«No hay nada reconocible, ya sea material o humano» entre los restos encontrados en Nuevo León, expresó el funcionario en declaraciones a la televisión. El impacto fue tan fuerte que los restos del avión «están esparcidos en una zona de 250 a 300 metros».
Una retorcida licencia de conductor con el nombre y una fotografía de Rivera fue encontrada entre los restos en el lugar del impacto.
Las autoridades no han informado sobre las causas del percance, pero los restos del avión fueron hallados cerca de la localidad de Iturbide en la Sierra Madre Oriental, donde el terreno es muy accidentado.
El Learjet 25, con matrícula N345MC, despegó de Monterrey a las 3:30 horas locales y 10 minutos después se perdió el contacto con el aparato.
Junto con Rivera viajaban el relacionista público Arturo Rivera, el abogado Mario Macías, el maquillista Jacob Llenares y un quinto tripulante de momento identificado sólo como Genaro N., además de los pilotos Miguel Pérez y Alejandro Torres, de acuerdo con un comunicado de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes.
Los padres de Rivera son mexicanos que emigraron a Estados Unidos. Dos de sus cinco hermanos, Lupillo y Juan Rivera, son también cantantes reconocidos en la música grupera.
Estudió administración de empresas y debutó formalmente en la música en 1995 con la presentación del álbum «Chacalosa». Debido a su éxito, grabó otros dos discos independientes, «Somos Rivera» y «Adiós a Selena», un tributo a la cantante asesinado Selena.
A finales de la década de 1990, Rivera firmó con la disquera Sony Music y grabó dos discos. Pero el mayor éxito le llegó cuando se adhirió a Fonovisa y presentó en 2005 su álbum «Parrandera, rebelde y atrevida».
Además de cantante, figura también como empresaria y actriz. Apareció en la película indie Filly Brown, que fue exhibida en el Festival de Cine Sundance. Actuó en el papel de la madre de Filly Brown en la cárcel.
Filmaba la tercera temporada de «I love Jenni», en la compartía momentos especiales con sus hijos y realizaba recorridos por México y Estados Unidos. También tiene programas de realidad simulada: «Jenni Rivera Presents: Chiquis and Raq-C» y «Chiquis `n Control» de su hija.
Luego del concierto del sábado en Monterrey, ofreció una rueda de prensa en la que habló de su estado emocional por el reciente divorsio con el ex lanzador de las mayores Esteban Loaiza, quien jugó con equipos como los Yanquis de Nueva York y los Dodgers de Los Angeles.
«No puedo apendejarme (expresión malsonante por atontarse) en lo negativo porque eso te destruye. Quizá esté tratando de alejar los problemas y enfocarme a lo positivo. Es lo mejor que yo puedo hacer. Soy mujer como cualquier otra y quizá también me suceden cosas más feas que a cualquier otra mujer», dijo Rivera. «Las veces que me he caído son las veces que me he levantado».
Rivera anunció en octubre que se divorciaba de Loaiza después de dos años de matrimonio.
Frente a la casa de sus progenitores en Lakewood, decorada con motivos navideños como un nacimiento y luces de colores, un par de hijas de la cantante y otros jovencitos de la familia o amistades entonaron cánticos cristianos acompañados por una guitarra frente a decenas de reporteros que grababan el evento o transmitían en vivo.