Un muchacho que vivía en un bosque, creyó un día escuchar la voz de otro chico a lo lejos. Cuando él gritaba ¡Hola!, la voz le respondía ¡Hola! El niño no sabía que se trataba del eco de su propia voz, entonces comenzó a gritar insultos que eran contestados inmediatamente. Después de un rato se fue a casa y le contó lo que sucedía a su madre, diciéndole que había un muchacho muy malo en el bosque, ella que comprendía lo que pasaba, le dijo que hablara bondadosamente al joven para ver si este le respondía del mismo modo, el chico salió de nuevo y así lo hizo, enseguida se encontró que sus palabras de cariño eran contestadas de la misma manera.
Esta historia es bastante ilustrativa, pues en muchas oportunidades pensamos que tenemos vecinos, familiares o compañeros de trabajo malos, que de alguna u otra manera nos desagradan y por ello nos aferramos a lo que creemos sobre tal persona y la calificamos de manera negativa descartándola de nuestro círculo afectivo, sin darnos cuenta que probablemente el problema no está en ellos sino en nosotros mismos. Estas relaciones lo que hacen es sacar a la luz áreas escondidas dentro de nosotros. Mientras más cercana la relación, más poderoso el impacto y mayor lo que sale dentro de nosotros.
El poder de las relaciones románticas
El matrimonio y las relaciones románticas probablemente sean el lugar de mayor impacto entre todas las relaciones de la tierra. El matrimonio no crea problemas… los revela. Ya traes esos problemas, cosas que nunca fueron evidentes hasta que no entras en una relación tan cercana. No sabes lo que hay dentro de ti hasta que no te mueven. Y la mayoría de nosotros no tienen ese primer gran fuerte y abrumador golpe hasta que entramos en una relación romántica. Esa es la razón por la cual la persona con la que hacen el más fuerte compromiso, es siempre la que va producir el mayor impacto en tu vida y con la cual regularmente terminarás más enojado que con cualquier otra persona del planeta.Todos nosotros tenemos cosas que están allí dentro, y todos nosotros culpamos a la persona de quien estamos más enamorados por lo que sale de nosotros. Esa persona no produce esas cosas que salen de ti, sólo te impacta y ellas salen de adentro, donde han estado desde que se originaron en una etapa de tu vida.
Las relaciones humanas tal vez sean un punto que nos suena familiar y nada complicado, por eso casi nunca nos dedicamos a indagar sobre el tema, además pensamos que está bastante trillado, y que ya existen muchos libros o materiales que nos hablan siempre de lo mismo. Sin embargo, si aplicamos una evaluación a un pequeño grupo de personas o nos autoevaluamos seguramente encontraríamos que en esto de las relaciones nos falta mucho por aprender y aplicar.
Claves prácticas para relacionarse mejor
Cuando se trata de las relaciones, todo comienza con el respeto, con la disposición de reconocer el valor en la otra persona. “El secreto para vivir en paz con todos consiste en el arte e comprender a cada uno según su individualidad.” (Federico Luis Jahn, educador alemán). Les Giblin, escritor sobre el tema de las relaciones humanas, dice: «No puede hacer que un compañero se sienta importante en su presencia si secretamente cree que es un don nadie». Los seres humanos generalmente tendemos a señalar o despreciar a los demás sin conocerlos. Por esta razón no debemos descalificar a las personas haciendo comentarios ofensivos o humillantes, por el contrario expresa palabras cargadas de aliento, motivación y amor. La Biblia dice: «Sobre todo, ámense los unos con los otros profundamente, porque el amor cubre multitud de pecados» (1 Pedro 4:8)
Presta atención a lo que está dentro de ti cuando te relacionas con otros, ya que eso revela mucho de que realmente hay en tu corazón. Como lo dice el Sabio Rey Salomón: “Por sobre todas las cosas cuida tu corazón, porque de él se origina toda tu vida.” (Proverbios 4:23) No somos muy buenos guardando nuestro corazón, pero somos muy buenos monitoreando el comportamiento de nuestros compañeros.
Nunca trates de manera despectiva a los demás, mejor has que se sientan especiales cuando estés con ellos, prestándoles siempre toda la atención posible. “Comienza a manifestarse la madurez cuando sentimos que nuestra preocupación es mayor por los demás que por nosotros mismos”. (Albert Einsten) Exprésales palabras de elogio y la gente se conectará contigo cuando vea que te preocupas por ellos. «Las palabras del hombre son aguas profundas, arroyo de aguas vivas, fuente de sabiduría». (Proverbios 18:4) La forma en la que te relacionas con tus más cercanos dice mucho de ti.
Ten en cuenta que las relaciones nos ayudan a definir quiénes somos y lo que podemos llegar a ser. Por lo que vale la pena invertir tiempo en ellas, como dijo RobGoldston, profesor de psicología de la Universidad de Indiana: “En tu relación con cualquier persona, pierdes mucho si no te tomas el tiempo necesario en comprenderla.”
¿Cómo estás en términos de tus relaciones? ¿Dedicas mucho tiempo y energías a establecer relaciones sólidas? Recuerda que pocas cosas te pagarán tan altos dividendos como el tiempo que dedicas en entender a los demás. La vida se basa en relaciones, todo lo demás son accesorios. Casi nada le agregará más a tu crecimiento como persona, que el hecho de establecer buenas amistades. Conviértete en alguien que valora mucho las relaciones, esto con seguridad te traerá un importante éxito personal.
¡ESFUÉRZATE Y HAZLO!