Una verdadera tertulia musical fue la que disfrutaron los asistentes a la Sala Alternativa de la Fundación Juan Carmona de EL IMPULSO, que ayer le abrió sus puertas a los integrantes del ensamble Deos Nova, para la presentación de Manos a la bossa, su primera producción discográfica.
Con tan sólo dos años en la escena musical, la agrupación ha logrado instaurar un sonido propio al combinar lo mejor del bossa nova, con instrumentos venezolanos y letras universales.
Así lo demostraron en el encuentro de ayer, que se convirtió en un concierto de amigos y cómplices musicales, entre ellos Iván Brito López, quien se encargó de presentar cada una de las piezas ejecutadas por el ensamble, entre anécdotas y conocimientos sobre autores de décadas pasadas, dándole un agregado histórico y cultural a la cita.
A las 11:30 de la manana inició la cita con María Fernanda González (bandola llanera), Jonathan Segovia (cuatro), Jonathan Díaz (maracas), Marcos Infante (percusión) y Alfredo Quintero (bajo y dirección musical).
La riqueza rítmica inició con una pieza que la agrupación decidió llamar Dos personajes, al unir los temas Aires larenses y Ramoncito en cimarrona.
De ahí en adelante se desbordó repertorio cargado de sonidos e invitados especiales. El segundo tema fue Un frutero con swing, escrito por Cruz Felipe Iriarte, autor de composiciones significativas para la música venezolana.
Entre amigos
El primer invitado de la mañana fue Luis Miguel Badaraco, el cantautor y guitarrista que llegó para ejecutar su instrumento de cuerdas en una pieza del brasilero Carlos Antonio Jobín.
También se hizo presente el arpista Jorge Yépez, quien acompañó a Deos Nova a tocar Camaguán, de El Indio Figueredo.
Por su parte, Calixto Cadenas llegó a la Sala Alternativa con su clarinete para darle vida a La chica de Ipanema.
Gustavo Mendoza fue otro de los invitados especiales. Él llevó su guitarra para otorgarle un sonido especial al afamado bolero de Consuelo Velásquez, Bésame mucho, que el ensamble tocó en clave de rumba flamenca, mientras el público hacía un acompañamiento especial con las palmas.
La cantante Laura Pérez, esposa del percusionista Marcos Infante, también asistió al encuentro para dedicar a Iván Brito López, la pieza Barquisimeto, escrita por su abuelo a finales de la década de los 50’.
Paseo por diversos sonidos
El merengue Barlovento, de Eduardo Serrano, también se escuchó en la Sala Alternativa, en medio de un variado repertorio que mostró parte de lo que encontrarán en el disco Manos a la bossa, que bautizaron con cocuy larense al final del concierto
No podía faltar una pieza de Aldemaro Romero, quien revolucionó la música con su onda nueva. Del fallecido maestro sonó Poco a poco, pieza que tocaron en swing.
Un arreglo de San Rafael, que los integrantes de Deos Nova titularon El tercer arcángel, también estremeció los sentidos del público que aplaudió gustoso otras canciones entre sonidos de los diferentes elementos que conforman la percusión, los acoplados instrumentos de cuerda y el característico sonar de las maracas.
Los músicos agradecieron la presencia de colegas y amigos, además de exponentes de la plástica regional como el maestro Armando Villalón y los más jóvenes artistas Manuel Brito y Carlos Durán, creadores del diseño de la producción discográfica que bautizaron en este concierto que se mostró a casa llena.
Fotos: Rinolfo Quintero