En la calle C con calle 7, de la urbanización Barici, en el este de Barquisimeto, hay rastros de la desidia oficial. El tramo se está hundiendo desde hace varios meses y, en las últimas semanas, ha empeorado el panorama. Los vecinos, por medidas de seguridad, cerraron una parte del acceso, sin embargo, la problemática continúa.
En este sentido, exhortan a la Alcaldía de Iribarren y a la hidrológica, a fin de que coordinen las posibles soluciones. Hay vecinos que argumentan la humedad del suelo, a causa de una ruptura subterránea en las tuberías de aguas blancas; mientras que otros adjudican el daño a la falta de mantenimiento vial.
Lo cierto del caso, es el riesgo de que el hundimiento de la capa asfáltica se extienda a otros tramos. En la misma dirección, una vieja garita está repleta de maleza y sirve de guarida a los delincuentes que frecuentan la zona. Además está en abandono un espacio semejante a una cabaña donde los asientos, mesas y parrilleras, tienen mal aspecto.
Javier Pineda, vecino, exhortó a los organismos encargados de la vialidad y también a Hidrolara, a objeto de que recuperen uno de los tramos que comunicaba directamente con la plazoleta de la urbanización. También se refirió a la colocación de los reductores de velocidad o muros de concreto “colocados sin permiso de las autoridades y construidos muy seguidos”.
Terepaima
En la urbanización Terepaima, la vialidad tiene huecos a los largo de la avenida principal. Los habitantes, en reiteradas oportunidades, han solicitado la ayuda de la Empresa Municipal de Infraestructura y Conservación del Ambiente (Emica) sólo que no mandan a las cuadrillas de reparación. ¿Las consecuencias? Deterioro de la capa asfáltica.
Los vecinos se preguntan dónde quedó el plan Asfalto Parejo, promovido por el gobierno municipal, donde las comunidades del este, poco fueron beneficiadas a pesar de las constantes denuncias hechas por los residentes. Barici, Terepaima, Pedregal, Río Lama, Nueva Segovia, El Parque, Colinas de Santa Rosa, entre otros urbanismos, son afectados por los huecos.
Otra de las quejas entre los residentes es la falta de señalización y sustitución de algunas que se observan en mal estado. Hace falta el rayado en buena parte de las calles y es conveniente reforzar la iluminación en los espacios comunitarios, así como en las vías principales.
Por otro lado, Gabriela de Márquez, otra de las vecinas, mencionó el descuido en las áreas verdes, especialmente, las que colindan con la urbanización El Pedregal. Exhortó a una mayor conciencia ciudadana a fin de que no arrojen desperdicios al piso ni dejen las necesidades fisiológicas dejadas por sus mascotas.
Aprovechó la oportunidad para solicitar la instalación de papeleras al Instituto Municipal del Aseo Urbano (Imaubar). En otras zonas de la ciudad, como el centro, las papeleras con mensajes ecológicos han dado buenos resultados para disminuir la cantidad de basura en las calles.
Seguridad para todos
Para nadie es un secreto. En las urbanizaciones del este de Barquisimeto, la delincuencia anda suelta, en detrimento de los ciudadanos que residen en conjuntos residenciales privados o no.
Es conveniente solicitar la cooperación de los organismos de seguridad a fin de que garanticen la protección de las personas que más son atacadas por el hampa. El robo de vehículos, continúa siendo el principal problema al momento de llegar a casa o salir de ella. Los habitantes de urbanismos como Barici, Santa Elena, Nueva Segovia, Urbanización del Este, entre otros, se encomiendan a Dios, como única alternativa.
“Las patrullas no se ven por aquí; los delincuentes saben que después de la Vargas, hacia el este, no hay quién proteja a los ciudadanos”, declaró una vecina.
Fotos: Daniel Arrieta
