El pasado 22 de agosto, personal de esta redacción se trasladó hasta la urbanización Club Hípico Las Trinitarias, al este de la ciudad, atendiendo las denuncias de la comunidad sobre un problema con las aguas negras del sector.
En aquella oportunidad, Pedro Palacio, vocero de Servicios Públicos del consejo comunal indicó que “desde hace casi tres años, colapsó un colector de aguas negras que pasa por debajo del canal Fundalara y ocasionó el desborde de las aguas por la boca de visita aledaña”. Debido a este problema, dichas aguas fueron desviadas al canal y no siguieron recorriendo parte de la avenida principal de la urbanización La Rosaleda, aledaña al Club Hípico Las Trinitarias. Sin embargo, esta medida que al comienzo era provisional, se ha convertido en el principal foco de contaminación del sector. El olor desagradable se respira en todas las zonas aledañas a la fuga de agua negra que es arrojada al servicio de recolección de aguas de lluvias, situación que ha provocado malestar a todos los residentes de dicha comunidad.
En esa misma ocasión, Pedro Sánchez, ingeniero y gerente de Obras de la hidrológica del estado, dijo: “En los próximos 15 días empezarán los trabajos con la instalación de 60 metros de tuberías de concreto de 27 pulgadas, un presupuesto de 600 mil bolívares y una duración de mes y medio de trabajo”, al ser consultado por el problema. Más de tres meses después, nada de lo dicho en esa ocasión se cumplió y la zona presenta la misma condición que en la primera visita. En tal sentido, Palacio, uno de los habitantes más activos en la búsqueda de solución al problema, expresa que en varias oportunidades se han dirigido hasta la sede de Hidrolara, “donde somos atendidos muy bien, dicen que nos solventarán el problema, pero nunca cumplen”, indicó. “Dicen que tienen mucho trabajo”.
Antes del anuncio hecho por el representante de Hidrolara, (en agosto pasado), en noviembre del 2011, personal de esta empresa se había dirigido hasta el sitio con máquinas y tubos de concreto para la sustitución del colector, sin embargo, la ubicación de un poste coincidía con el trayecto del colector y los trabajos no se realizarían entretanto Corpoelec removiera el alumbrado, “a principio de este año removieron el poste, y desde ese entonces esperamos por la reanudación de la obra”, dijo el representante comunal. Palacio comentó que debido a un brote de enfermedades en el sector, el consejo comunal pidió al Consejo Federal de Gobierno un crédito para solventar el problema de las cloacas, “y fueron aprobados 55 mil bolívares que Hidrolara rechazó porque ellos querían seguir llevando adelante el trabajo millonario que tienen previsto para la reparación del colector”.
Por último, Alí Arias, quien vive en Terrazas del Club Hípico, indica que “regularmente compra ambientadores y mantiene sus ventanas cerradas para evitar olores que en la mañana y al mediodía son más fuertes”.
PDVSA no surte
Además del problema de contaminación que existe en la zona, vecinos de la comunidad Club Hípico Las Trinitarias no cuentan con el servicio de gas doméstico por tuberías, el cual fue instalado en gran parte de las calles de la zona. “Los trabajos están inconclusos y aún tenemos gas por bombonas”, dijo Pedro Palacio, del consejo comunal.
El representante comunal ha dicho que, en varias ocasiones, han enviado misivas a los responsables de esta empresa sin que haya existido una respuesta ante el problema.
Fotos: Ángel Zambrano