#Opinión: Parafraseos 25/11/2012. Por: Ramón A. Querales

•Podemos evadir la responsabilidad de ir a votar el 16-D pero no podremos evadir las consecuencias de esa carencia de responsabilidad
•Que no se le ocurra a San Nicolás traer los regalos por barco porque nos embarca. Llegarían en el 2013 después del atraco portuario
•Vengo caminando por la carrera 21 en dirección este-oeste y veo a una doñita parada con una bolsa negra al lado. Le saludo con intenciones de ayudarla y le pregunto: ¿Está cansadita con la bolsa? “No”. “Estoy cansadita de pedir”. “Estoy pidiendo porque tengo mucha necesidad. ¿Usted me puede dar una ayudita? Vivo en Los Cerrajones”. Le ayudé y ella me ayudó a conocer mejor Los Cerrajones
•Por los vientos que soplan, parece que el Grupo FRÍO quiere imitar a Pacheco (el que baja de Galipán por estas fechas a enfriar la ciudad capital) haciendo lo propio en nuestra ciudad. Mala cosa, pues ese grupo en vez de paz lo que trae es intranquilidad
•“La industria del queso lanza SOS” titular en EL IMPULSO del 20-11-12. Eso, en relación al desmesurado aumento de las importaciones en ese rubro. Yo elucubro que por ahí huele a queso ¿Quién se comió mi queso?
•Inocentemente pensé que los túneles de seguridad los pudiesen construir los privados de libertad por ser ellos expertos en la materia. Esa iba a ser mi sugerencia a la fosforito
•Según el ministro de Finanzas el Producto Interno Bruto creció en 5,2% el tercer trimestre. Está difícil de creer ese brutalcrecimiento. Giordani sólo piensa en “money, money”
•“La humanidad está dividida en tres tipos de personajes: los inamovibles, los movibles, y los que hacen que los anteriores se muevan”. Proverbio árabe
•En vez de ufanarnos de que tenemos la ciudad más limpia del país, sería más preciso pregonar que Barquisimeto es la ciudad menos sucia
•Ejercitarse bien temprano en la mañana para quienes no lo hacen con muchas ganas, tiene la ventaja de que, al hacerlo casi dormidos, pueda que el trago amargo pase desapercibido
•Una muestra fiel de la anarquía en la cual vivimos actualmente en este país la tenemos en los “motorialzados”. Más guapos y apoyaos no podrían sentirse. Los niños y los adultos mayores sufren con esa anarquía, como primeros receptores. Los “motorialzados” son, del gobierno, sus niños mimados, los atunaquetunatun. Por cierto, muy aficionados al hit and run
•Una promesa se parece a una nube cargadita que promete agua y se llega a cumplir sólo cuando llueve
•Un vicio se hace más difícil de erradicar cuando con nuestra actitud lo vemos como virtud
•El oficialismo nos cayó a palos en octubre durante las elecciones. Ojalá que en diciembre nosotros nos caigamos a palo celebrando que el oficialismo esta vez no hizo lo mismo
•El otro día fui a la farmacia a comprar una medicina (recomendada por una amiga internista) que me iba a ayudar con la memoria y no pude recordar el nombre de la misma. El farmaceuta se rio y me dijo: “Eso sí está grave”. “¿Qué está grave?” le pregunté. “Más bien gravísimo”, me replicó, y se fue con una sonrisa de oreja a oreja a atender a otro cliente
•Vista la celeridad con que el gobierno ha estado graduando profesionales, le sugiero que les ofrezca diplomados sabatinos con entrega de certificados ese mismo sábado por la tarde
•A la edad de 9 años yo me gané mi primer viaje a pasar “vagaciones” en Barquisimeto. Según mi mami “yo había salido muy bien en las violetas”. Y merecía ¡hacer mi sueño realidad! “Aquí le encomiendo al muchachito”, le dijo mi madre al chofer de apellido Gozaine. Y precisamente para eso quería ir yo a la capital: ¡A gozá! Como buen pobre, mi equipaje, sin mucha bulla, consistía en una caja de cartón, amarrada fuertemente con cabuya. La misma contenía dos docenas de huevos criollitos envueltos en rollitos deperiódico, una docena de oloroso pan de horno recién horneado (de los llamados “pasemeotros” porque quien se comía uno se comía otro), un par de alpargatas para estrenar allá, y dos mudas de ropa. Ya dentro del bus de la famosa Línea Urdaneta, vi cuando mi mamá le entregaba la caja al colector y éste la lanzaba con gran puntería, hacia una esquina de la parrilla aérea donde iría, junto alresto del equipaje. Ese acto, aunado a los tumbos del bus en la carretera (más de piedra que de tierra) hicieron que el primer día de mi sueño, al salir de mi villa, no fuese tal, sino una pesadilla. Como no iba a serlo si al llegar a casa de unatía, mi equipaje, debido a todo el anterior despelote, había llegado hecho todo un mazacote. Como dijo alguien: “Sin aventura la civilización estaría en completa decadencia”
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