Autoridades del Ministerio para el Servicio Penitenciario (Mppsp) ofrecieron una rueda de prensa en el Internado Nacional de Orientación Femenina (Inof) para desmentir las acusaciones hechas por la jueza María Lourdes Afiuni.
Afiuni denunció supuestos maltratos sufridos durante su permanencia en dicho recinto penitenciario, en un libro escrito por el periodista Francisco Olivares.
La Directora de la Región Centro –Occidental del Mppsp y directora del Inof durante los años 2009 y 2011, Isabel González, de manera tajante declaró: “Somos los primeros interesados en que se aclare esta situación e informamos que solicitaremos el inicio de un procedimiento penal, civil y administrativo por difamación e injuria”.
González estuvo acompañada por la directora de Relaciones Internacionales y Derechos Humanos, Laila Tajeldine, la directora de la Región Capital, Ana Toro, la directora actual del Inof, Yepsi García y la directora de Destacamento de Trabajo del Inof, Alejandra Funes.
“En ese libro ella (Afiuni) cuenta que durante su permanencia en el Inof fue víctima de maltratos y una supuesta violación; todas esas acusaciones son falsas, se trata de señalamientos graves que vulneran la dignidad humana y que han provocado una grave conmoción y preocupación entre las privadas de libertad y sus familiares”, dijo.
González señaló que la privada de libertad Afiuni permaneció recluida en una habitación sola en un área de máxima seguridad denominada Admisión donde era custodiada por personal femenino y donde está prohibida la entrada de caballeros.
“Ella incluso gozaba de privilegios, precisamente porque debíamos garantizar su integridad física ya que ella misma había solicitado máxima protección ante el Ministerio Público pues temía por su vida”.
Por su parte, la directora de Relaciones Internacionales y Derechos Humanos, Laila Tajeldine, desmintió que Afiuni hubiese interpuesto denuncia alguna ante organismos internacionales.
“Afiuni recibió tratamiento y permanentemente fue evaluada por médicos y durante todo ese tiempo en ningún momento denunció que fue abusada sexualmente”.
Finalmente, señaló “que esta campaña forma parte de una matriz de opinión internacional contra Venezuela en la que participan activamente ONGs vinculadas al tema penitenciario para acusar al Gobierno venezolano de propiciar y permitir la violación de derechos humanos, lo cual no hace más que servir a los intereses del Gobierno de Estados Unidos.