La Corte Internacional de Justicia (CIJ) concedió este lunes a Colombia la soberanía en el mar Caribe de siete cayos del archipiélago de San Andrés, pero todavía no se ha pronunciado sobre la delimitación de la frontera marítima entre Nicaragua y Colombia.
«Colombia y no Nicaragua tiene la soberanía de los cayos Albuquerque, Este Sudeste, Roncador, Serrana, Quitasueño, Serranilla y Bajonuevo», señaló el presidente de la CIJ, Peter Tomka durante la lectura del fallo que todavía no ha terminado.
El juez señaló que «durante decenios, Colombia ha actuado como soberano» en esos cayos y «ejecutado su autoridad soberana, sin oposición de Nicaragua».
También señaló que las autoridades de Bogotá han ejercido una administración pública, así como realizado trabajos públicos, visitas navales, operaciones de búsqueda y salvamento y de consulado.
«Nicaragua no ha dado pruebas de actuar a título de soberanía» sobre esos cayos, leyó el presidente de la CIJ.
Las aguas en disputa son zonas de gran riqueza pesquera y petrolífera, cuya lucha por su control tuvo un punto álgido en 2002.
En julio de ese año, los dos países tuvieron un enfrentamiento diplomático por la convocatoria nicaragüense de una licitación internacional para otorgar concesiones petroleras en aguas caribeñas bajo jurisdicción colombiana.
En 2007 la CIJ ya emitió un fallo respondiendo a alegaciones provisionales de Colombia, en la que atribuía a Bogotá la soberanía de las principales islas del archipiélago: San Andrés, Providencia y Santa Catalina.
El fallo de la CIJ, que es inapelable, pondrá fin a una controversia jurídica de once años pero que diplomática y políticamente se remonta a 1980, cuando Nicaragua dio por inválido el Tratado Esguerra-Bárcenas de 1928-1930.
En ese Tratado, los dos países firmaron un acuerdo que establecía el meridiano 82 como frontera marítima entre Nicaragua y Colombia, cuyas costas están separadas por una