Apenas enviar la comunidad un mensaje a La Columna de Cheo denunciando una práctica insana de algunas personas del sector Ruiz Pineda I, al oeste de la ciudad, miembros de esta redacción se movilizaron hasta el lugar para constatar la situación.
Efectivamente, tal y como lo describe el mensaje, en la calle 2 de esta zona, en su extremo sur que forma parte del cono de seguridad del Aeropuerto Internacional General Jacinto Lara, vecinos de la comunidad están arrojando cientos de desperdicios provocando la proliferación de plagas, contaminación y el mal olor.
Al momento de arribar al lugar, miembros de la comunidad estaban realizando lo denunciado; uno de ellos arrojó restos de una palmera vieja, mientras que otro, cargando una carrucha, vertía escombros de construcción y desperdicios en general.
Luego de ser testigos de los hechos, se llamó al residente de una de las casas cercanas a la zona y, por ende, uno de los más afectados de esta situación. Celso Méndez explica que allí lanzan una variedad de desechos que van desde elementos plásticos, desperdicios animales y “hasta cadáveres humanos son dejados ahí”. “En oportunidades, he tenido que agarrar los desperdicios de animales que dejan en la orilla del terreno y llevarlos más lejos, de lo contrario el olor sería insoportable”, explicó Méndez quien, declaró, tiene 27 años habitando el lugar e indicó que en años pasados la situación no era tan crítica como en la actualidad.
Además, Méndez dijo que es él, junto a familiares y vecinos que están en la misma calle, quienes mantienen limpios los primeros metros del terreno. “Uno habla con los vecinos para que tomen conciencia de la situación pero no hay forma de que entiendan”, dijo Celso Méndez.
Se conoció que el servicio de aseo urbano en la comunidad es “muy deficiente”, por lo cual la situación podría estar incentivando a las personas a que se deshagan de la basura por sus propios medios.
“Los camiones (aseo) pasaban dos veces por semana; ahora pasa una vez, aunque tienen dos semanas que no lo hacen”, explicó Celso. En frente de su casa hay varios tobos llenos de desperdicios esperando a que sean recogidos por los servicios del Instituto Municipal de Aseo Urbano y Domiciliario (Imaubar).
Calles destrozadas
Por si fuera poco, Pedro Márquez, quien habita la carrera 7 con calle 2 de Ruiz Pineda, indicó que las condiciones viales del sector “son las peores”.
“La calle que arreglaron fue la principal (haciendo referencia a la calle 1), pero las demás tienen muchas deficiencias en la capa asfáltica”, explicó Márquez, quien en días pasados tuvo que reparar su carro por los daños causados.
“La alcaldesa no hace nada y los consejos comunales sólo sirven para movilizar gente a votar, pero no para reparar las calles”, dijo.
Fotos: Ricardo Marapacuto