Este fin de semana se cometieron diez homicidios en la región larense de los cuales siete ocurrieron en el municipio Iribarren, uno en Torres y dos en Morán.
La víctima de Carora es un jovencito de once años quien quedó atrapado en la línea de fuego. El niño se encontraba haciendo su tarea en su residencia cuando comenzó un intercambio de balas entre delincuentes de la zona. La madre gritó para que corriera pero una bala lo alcanzó. Se conoció que los sabuesos del Cicpc de Carora tienen buenas pistas sobre el caso.
El último cuerpo en ingresar a la morgue del Hospital Central Antonio María Pineda fue el de Dennis José Pérez González, de 19 años de edad. Es residente del caserío El Molino de El Tocuyo, municipio Morán.
El hecho ocurrió dentro de su residencia y la víctima fatal residía con sus padres. Según algunos testigos los homicidas viven en la misma zona y el móvil del crimen sería porque Pérez González le debía un dinero.
El fallecido fue trasladado hasta el Hospital Egidio Montesinos, presentó un disparo en el pómulo derecho que le quitó la vida.
Pérez González tenía un antecedente por el delito de porte ilícito de arma de fuego del 26 de agosto del presente año, cuando se enfrentó a una comisión de la policía.
Por los diez crímenes perpetrados este fin de semana el Eje Contra Homicidios del Cicpc Lara está trabajando en todos los casos, buscando la solución de los mismos además de la reducción de este delito.
Foto: Archivo
