El barquisimetano Randall Figueroa, del equipo Gobernación de Carabobo, dio otra demostración de potencia, con un embalaje a fondo –elevada velocidad- en los metros finales, para superar al estelar Gil Cordovés (Gobernación del Zulia) en la tercera etapa de la Vuelta al Zulia y mantener intactas sus posibilidades de quedarse con el título de la competencia.
En un final con ligero descenso, propicio para desarrollar velocidades considerables, Figueroa, por el centro de la amplia calzada, tomó la cuerda en plena recta final y se llevó en claro al cubano-venezolano para rubricar otra victoria categórica.
Cordovés se quejó de una “jugada sucia” de Figueroa, al indicar que le había cerrado el paso a poco menos de un kilómetro de la llegada, pero los comisarios de carrera declararon limpio el desempeño del larense y ratificaron su triunfo.
El corredor de 23 años, sublevado ante el mejor embalador de la historia en el pelotón nacional, dejó tiempo de 2 horas, 41 minutos y 19 segundos para el segmento de 118 kilómetros recorrido entre La Concepción –albergó un circuito de 36- y Villa del Rosario, siempre en terreno plano y con una elevada temperatura, principalmente al caer el mediodía.
“No me gusta apelar a cosas ilegales. Gil Cordovés es un amigo de la familia y no tengo que trancarlo o hacer algo extradeportivo para ganarle. El embalaje fue limpio, gané de buena manera”, señaló Figueroa ante los reclamos de su adversario -45 años- quien lo manoteó una vez cruzó la meta.
Figueroa pasó como una bala por la meta, a más de 60 kilómetros por hora. Atraviesa, sin duda, por el mejor momento de su carrera. “Me preparé muy bien, hice las cosas como es correcto. Hice entrenamientos de ocho horas y me decían que era un loco, pero aquí están los resultados… se lo debo también a mi mamá, que me puso a dieta, a comer cotufas, y logré rebajar”, señaló el corredor, que lleva dos triunfos al hilo frente a Cordovés, un ciclista que muy pocas veces permite que lo superen en jornadas continuas.
Como en la jornada previa, Figueroa -que volvió a recordar a su padre al momento de ofrecer declaraciones- rompió las estrategias del equipo zuliano, que ejerció el control de la carrera (salvo una fuga en los kilómetros previos a la llegada) para prepararle el camino a Cordovés, pero el barquisimetano se atravesó en el camino del cubano de origen para arruinarle la fiesta, en una llegada con buen público a las orillas de la carretera.
Cordovés no ganó la etapa como era su objetivo, pero salvó el día gracias a las bonificaciones, toda vez que sumó seis segundos al ganar dos premios intermedios y otra media docena por cruzar segundo en la meta.
Su ventaja sobre Figueroa se mantiene en cinco segundos, pero sí ha logrado sacarle diferencia a otros rivales como Honorio Machado y Jesús Pérez.
La jornada comenzó con un circuito en La Concepción (diez circunvalaciones) a las 9 y 45 de la mañana, hora en la que el calor agobiaba, aunque sin hacer mella en el pelotón. Después el gusano tomó rumbo a Perijá, en una carretera ancha, lo que aprovecharon los colombianos Edison Paredes y Ronaldo Trujillo, además de Andrys Hernández, para lanzarse en fuga, pero el trío no alcanzó una diferencia mayor al minuto y fue atenazado a muy poco de la llegada, una vez los zulianos prendieron la moto para hacerle el trabajo a Cordovés.
El giro zuliano realiza su cuarta y antepenúltima etapa este viernes, con un circuito de 100 kilómetros en Machiques, que anticipa otra batalla entre Cordovés y Figueroa, los hombres que mejor forma exhiben en las llegadas masivas.
Foto: Luis Salazar/Enviado especial
