Miguel Cabrera aguarda a que la corona que le fue entregada en la Serie Mundial llegue a su casa. La colocará en un sitio prominente en su oficina.
«Se las mostraré a mis amigos, a mi familia», dijo el antesalista venezolano de los Tigres de Detroit el lunes después de sumar otra distinción tras superar al jardinero central de Pittsburgh, Andrew McCutchen, y al novato Mike Trout de los Angelinos como el jugador del año en una votación entre sus colegas de las Grandes Ligas.
«Creo que va a ser algo especial para mis hijos. … Va a ser una buena anécdota para mis nietos», agregó.
Cabrera, el primero que gana la Triple Corona desde 1967, bateó para .330 con 44 jonrones y 139 empujadas por los Tigres, campeones de la Liga Americana. El toletero recibió de las ligas mayores una verdadera corona durante la Serie Mundial en reconocimiento a su logro.
Detroit fue barrido por San Francisco en la Serie Mundial. Cabrera registró promedio de .231 con tres remolcadas y puso fin a esa serie cuando le cantaron el tercer strike.
«Es muy decepcionante porque no queríamos terminar como terminamos», recordó. «Fue muy difícil aceptar la forma en que perdimos».
Pero conseguir el premio al jugador del año fue especial porque los electores son sus pares en las Grandes Ligas. «Te enorgullece y te hace sentir que debes trabajar más duro, que tienes que trabajar para mejorar», señaló Cabrera, de 29 años.
«Tienes que mejorar cada año». El tercera base de Atlanta Chipper Jones, quien se retiró al término de la campaña, obtuvo el premio Marvin Miller a la excelencia dentro y fuera del terreno de juego al superar a Paul Konerko (Medias Blancas) y Michael Young (Rangers), según la votación entre los peloteros anunciada el lunes.
Otros de los galardones fueron conferidos a Cabrera (jugador más destacado de la Americana), McCutchen (jugador más destacado de la Nacional), David Price de Tampa Bay (pitcher más sobresaliente de la Americana) y R.A. Dickey de los Mets (pitcher más destacado de la Nacional).
Trout y el antesalista Todd Frazier (Rojos) fueron designados como los mejores novatos. Adam Dunn (Medias Blancas) y Buster Posey (San Francisco) fueron seleccionados como los mejores regresos del año.
La votación se realizó en septiembre.