De nuevo unaactuación descaradamente ilegal de un órgano público venezolano, pasará a la historia como el testimonio de una abyección interminable, de una inmoralidad infinita y de una entrega obscena a los peores intereses del régimen chavista por parte de las instituciones fundamentales del Estado.El CNE ha permitido, cuando el lapso está cerrado para todos los venezolanos desde el pasado mes de abril y violando su propia normativa, el cambio de ubicación para votar el próximo 16 de diciembre, de siete candidatos oficialistas a gobernadores y sus familiares y equipos de campaña. La razón es que esos candidatos o no son o no viven en las entidades donde se postularon. Practicando paracaidismo puro pues. Gracias a Dios no soy ninguno de los personajes del CNE ejecutores de semejante despropósito, porque la historia los recordará como aviesas figuras de la maldad, de la trampa y de la perversión.
Estoy convencido que poco o nada podemos hacer contra esa decisión. En Venezuela no hay instituciones que puedan frenar esas ilegales decisiones. Si al régimen le interesan determinados privilegios, se le otorgan y punto. Nada tiene que ver con su ilegalidad o su inmoralidad. Esa es la realidad de lo que vivimos actualmente. No existe Tribunal Supremo de Justicia, ni Fiscalía General de la República, ni Defensoría del Pueblo (la titular de esta última ya casi ni se nombra, está como escondida) que hagan cumplir la Constitución y las leyes de la República. Mientras tanto el pueblo sufriendo las arbitrariedades del régimen en medio de una gran impunidad.No he leído ni he visto una explicación convincente, en realidad no la hay, de semejante decisión. La mayoría de las rectoras del CNE están en el más absoluto silencio. Sólo oí a la señora Socorro Hernández exponiendo un ensayo de explicación,diría yo, tan inconsistente y peregrina que mejor era que no hubiera dicho nada. Esa señora no sé qué profesión tiene, pero no puede ser abogado. Vicente Díaz no estuvo de acuerdo con esa decisión, pero creo que le faltó contundencia y haberlo denunciado públicamente antes de que se descubriera por laauditoría de los libros de votación. Ni la Tibisay Lucena, ni la Sandra Oblitas,que me informan son abogadas, han dicho nada. Qué van a decir!!! Vergüenza ajena me produce todo esto. Me duele Venezuela y este es el ejemplo que reciben las nuevas generaciones. Cómo explicar, por ejemplo, en una cátedra de Deontología Jurídica, conductas como éstas. Ahora dudo que Capriles haya perdido las elecciones.Después de ver esto estoy convencido de que nada les importa a estos personajes, haberle robado el triunfo a Capriles. Pierde legitimidad la reelección de Chávez con actuaciones del CNE como la que comento.
La señora Hernández ha dicho que es una situación excepcional y yo le preguntaría de dónde viene esa excepcionalidad, qué norma las faculta para crear excepciones. Las normas jurídicas tienen como elemento de primera importancia, la generalidad, es decir, su aplicación es para todo el universo de personas a la cual está dirigida la norma. Nuestra Carta Magna establece en su Artículo 21 que “todas las personas son iguales ante la ley”. No puede haber discriminaciones, según el citado artículo 21 y termina señalando ese artículo que “la ley garantizará las condiciones jurídicas y administrativas para que la igualdad ante la ley sea real y efectiva”. ¿Entonces, señoras rectoras del CNE? De dónde sacaron la supuesta excepcionalidad? Es verdad, pudiera haber en la aplicación de una ley una situación excepcional que exima del cumplimiento de alguna obligación legal. Las leyes fiscales, por ejemplo, contienen exenciones y exoneraciones que levantan la obligación de pagar algunos tributos, pero esas excepciones deben estar expresamente establecidas en la ley que crea la obligación de que se trate o también puede atribuírsele a algún ente la facultad de levantar el cumplimiento de esas obligaciones. Pero en el caso que nos ocupa no hay nada de eso, el mismo CNE cerró el lapso para inscripción y cambios en el registro electoral y nadie puede hacerlo fuera de ese lapso, sea cual sea la situación. No hay excepciones, ni ente que pueda crearlas. Al escribir estas líneas me llega la noticia de que al Vicepresidente Maduro también se le permitió cambiarse de Valencia para Caracas. Qué desastre!!!Estamos frente a decisiones de facto, ilegales, arbitrarias y así debe conocerlo el país.
No puedo dejar de mencionar el pedido, casi ruego, que varias organizaciones de jóvenes le hicieron en marzo y abril al CNE para que prorrogara el lapso de inscripción y abriera más puntos de inscripción en universidades e institutos de educación superior. Todo eso fue desoído. La Oblitas salía, con cara de “yo no fui”, a decir que eso era imposible, no habrá prórroga, porque el registro debía estar listo con bastante antelación al día de las elecciones. El que no se inscriba dentro del lapso no podrá hacerlo y novotará, decía esa señora.No olvidemos lo que le hicieron a nuestros compatriotas en Miami para impedirles votar y lo que hicieron en muchos consulados para que la gente no pudiera inscribirse. De la petición para votar hecha por la juez Afiuni ni siquiera se ocuparon. No sé cómo puede caber tanta maldad en cabezas tan pequeñas.Serán recordadas como la personificación del bandidaje electoral.Sin embargo, debemos votar, es la única arma que tenemos, no hay más armas, los únicos éxitos que hemos tenido frente a este régimen, ha sido votando. Continuemos votando, a sabiendas de la rapacidad del ente comicial, algún día todo se sabrá.