Carmen Cañizales, de 54 años de edad, propietaria de varios negocios ferreteros en Barquisimeto fue secuestrada la tarde del jueves cuando llegaba a su vivienda, quinta Maya Raf, 2-17, ubicada en la calle 2 con carrera cuatro de Santa Isabel al oeste de la ciudad.
Cañizales esperaba a que su nieta de 9 años le abriera el portón para guardar el vehículo, cuando la niña abrió el portón la interceptaron dos hombres con pasamontañas y vestidos tipo comando, con las manos enguantadas y la sometieron. Como la mujer se resistía a irse con ellos uno de los hombres apuntó a la menor en la boca y las amenazaba de muerte. Cañizales dejó de resistirse, rogando que no le fueran hacer nada a la niña.
Los hombres la subieron a su Ford Fusión negro y se la llevaron. Rodaron cuatro cuadras y dejaron el vehículo abandonado frente al Liceo Jacobo Mármol. Allí hicieron el trasbordo a la mujer a otro vehículo y se la llevaron. Desde entonces no se ha sabido nada de la mujer.
Familiares fueron a denunciar el hecho en el Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas, pero les dijeron que debían pasar 72 horas para que la denuncia procediera. Desde entonces ha habido total tensión y hermetismo en la familia. Poco hablan del tema, sólo esperan a que alguno de los captores llamen para pedir algún tipo de rescate. Allegados a las familias aseguraron que hasta la tarde de ayer los familiares no se habían comunicado.
La quinta de Carmen Cañizales de frente morado con rejas blancas estaba totalmente cerrada. Se intentó hablar con los familiares, pero salió una de las hijas y dijo que “la disculparan, pero ellos no querían hablar del caso” y luego cerró la puerta.
La víctima además de ser dueña de la Ferretería La 22, ubicada en la Carrera 22 con calle 21 y 20 del centro de la capital larense, tiene un galpón alquilado en El Tostao al oeste de Barquisimeto, en el cual funcionan un supermercado. Tiene dos hijos mayores de edad y la nieta a la cual sometieron para llevársela. Cañizales cumple con un tratamiento para la hipertensión y no puede parar el tratamiento.
Trascendió que la nieta vive un severo trauma tras haber sido amenazada de muerte y apuntada a la cabeza con un arma de fuego.
Segundo secuestro en la familia
Se conoció que Carmen Cañizales es prima de Naileth Coromoto Gutiérrez, de 45 años, quien fuera secuestrada la mañana del 16 de marzo, en el sector San Francisco, al oeste de la ciudad crepuscular.La mujer vivió 42 días en cautiverio antes de ser liberada a las 11:00 de la noche en el sector las Torres del Sisal, del oeste de la capital larense. Iba a su trabajo en su vehículo Ford Focus, color plata, placas AA558GK, cuando varios hombres armados, la metieron en un vehículo y se la llevaron. Al ser liberada contó que desde ese momento estuvo vendada durante los 42 días.
Sólo me dejaban ver cuando iba al baño», relató Gutiérrez. Lloró y rezó durante 42 días pidiendo a Dios regresar con vida a su hogar, quienes hicieron varias manifestaciones en la calle exigiendo que la dejaran en libertad. Dijo que los secuestradores la dejaron cerca de las Torres del Sisal y le dijeron que esperara un momento antes de comenzar a caminar. Relató que iba a tomar un taxi, pero no lo hizo al percatarse que cerca de la zona donde la dejaron viven algunos de sus amigos, a los que les pidió que la llevaran a una clínica porque se sentía mal.
Enma de Gutiérrez, madre de la víctima, rompió en llanto al ver llegar a su hija con 7 kilos menos, producto de la deshidratación de la que fue diagnosticada por los médicos de una reconocida clínica de la ciudad.
«Esto no se lo deseo a nadie, han sido los peores días de mi vida. Mis oraciones me devolvieron a mi hija, Dios no la abandonó», refirió la mamá mientras abrazaba a su hija y la besaba en la frente.
Nunca se supo si por su liberación hubo algún pago. La menor comentó que uno de los plagiarios le dijo que la iban a liberar porque era una persona muy querida en Barquisimeto, al parecer la soltaron por la presión de los familiares y la sociedad en general.
Hoy la familia revive el duro tormento de tener a un familiar en cautiverio y piden al cielo que pronto Carmen Cañizales vuelva a casa.
Según cifras extraoficiales, en lo que va de año han secuestrado a 26 personas en el estado Lara.
Fotos: Edickson Durán