Gracias al aporte de la empresa privada, específicamente de Laboratorios Novartis, fue creada la Unidad para el Alivio del Dolor en el Hospital Universitario Pediátrico Agustín Zubillaga (HUPAZ), por un monto de 120 millones de bolívares.
Jorge Gaiti, director de la institución de salud, precisó que servirá para atender a todos los niños que vayan a la institución, tomando en cuenta que del 60 al 70% de las consultas pediátricas son referentes al dolor de algún tipo.
Como indicó Rafaela Pérez, quien será la coordinadora del área, el tratamiento del dolor en los niños enfermos ha sido una asignatura pendiente en las escuelas de medicina venezolanas.
“Contaremos con un equipo multidisciplinario de especialistas que tratarán a los niños con las más actualizadas técnicas de analgesia para aliviar el dolor de niños con cáncer, traumatismos, entre otros”, dijo Pérez.
Ahora bien, Gaiti destacó que esta Unidad del Dolor es la primera y única de zona centroccidental en un centro de salud público dedicado a la atención de niños, niñas y adolescentes.
Rafael Martínez, director médico de Novartis, dijo que sentían un orgullo poder contribuir a lograr este sueño para los más pequeños de la casa, y reiteró el compromiso con los pacientes infantiles.
“Podremos hacer anestesia local, también contaremos con los quirófanos para tratamientos más profundos y áreas para sedación”, aclaró Rafaela Pérez.
Alianzas estratégicas éticas
Por su parte, Gaiti destacó que no sólo es eliminar o disminuir el dolor en los niños, sino también evitarles secuelas psicológicas por largos tratamientos dolorosos, que pueden perdurar por el resto de su vida.
Señaló que dentro del Hospital Pediátrico cuentan con varias comisiones que le reportan a la dirección, como la comisión encargada del dolor, quienes se encargaron de buscar una alianza estratégica y ética con Laboratorios Novartis.
“Contaremos con cirujanos, oncólogos, psiquiatras, psicólogos, enfermeras, con un total de 22 trabajadores de salud”, explicó.
Indicó que poco a poco ya tienen varios años trabajando con el tratamiento del dolor, pero no contaban con un área específica para ello.
“Comenzamos con los niños con cáncer, porque a ellos se les realizan muchos tratamientos que pueden ocasionarles dolor, pero son técnicas que se extenderán a todos los pacientes que lo ameriten”, concluyó.
Fotos: Elías Rodríguez