Desde el año 2009 la Corporación Venezolana de Alimentos, CVA y la Empresa de Mecanizada Pedro Camejo, han dilapidado unos 10 millones de bolívares y los suelos del Valle del Turbio están pelados, sin cultivar.
Así lo señaló el ingeniero Manuel Cols, expresidente de Fudeco en un encuentro con los medios de comunicación.
Detalló que esta empresa, aprovechando el agua de los pozos de la Hacienda Agua Viva, instaló unos sofisticados equipos de riego por goteo, para sembrar tomates.
-Las plantas si acaso crecieron 40 centímetros y lo que produjeron fue un tomate “pasilla” de muy baja calidad y la maleza agobió el cultivo.
Precisó Cols que en el Valle han cubierto 14 hectáreas con una malla plástica negra, suspendida con guayas y parales de hierro.
Destacó que los materiales son de muy baja calidad y las mallas se han ido al suelo, y simplemente no hay cultivos.
-En esta fracasada práctica, por lo menos han gastado dos millones de bolívares, subrayó, adicionando que lo único que se pude ver en pie, son unos 100 arbolitos de especies forestales.
Las mallas para los cultivos controlados están destruidas y un invernadero está sin uso.
Comentó que en Las Petricas, dentro del Valle, existía un pozo de vieja data. Para su rehabilitación una contratista gastó 300 mil bolívares, pero el pozo terminó derrumbándose.
Ahora con equipos de Pdvsa intentan construir otro pozo de 125 metros de profundidad.
Foto: Luis Alberto Perozo Padua