Aunque el proceso electoral en su mayor parte se llevó en forma pacífica y con carácter cívico, en algunos centros de votación de Barquisimeto lo que sobraron fue problemas y trabas para que los electores pudieran ejercer su derecho al voto. Ejemplo de ello fue la situación vivida en la Escuela Estatal Graduada Vicente Salias, donde los participantes esperaron alrededor de doce horas para poder votar.
Una falla en las máquinas de las mesas 1 y 4 de este centro, ubicado en la calle 7 con carreras 3 y 4 de la urbanización Nueva Segovia, dejó a más de setecientos votantes en cola y a la espera de la reanudación del proceso.
De hecho, la mesa 1 apenas habría funcionado por espacio de quince minutos a las 7 de la mañana. Los reemplazos tampoco sirvieron para asegurar la votación electrónica en las mesas afectadas.
Poco después de la seis de la tarde, los electores permanecían a la espera del material electoral necesario para llevar a cabo la elección de manera manual, luego de que el Consejo Nacional Electoral ordenara la aplicación de este método ante la imposibilidad de llevar el proceso de la manera planificada. En medio de vítores las cajas contentivas del material fue ingresado en el centro de votación.
Con la aplicación del proceso manual, más de 760 electores pudieron finalmente ejercer su derecho al sufragio. Electores de otras mesas, que decidieron permanecer en el centro a la espera de la totalización, felicitaron la resistencia de los electores para exigir que una solución fuera tomada en su caso.
Durante su espera, los electores fueron asistidos por representantes de la Mesa de la Unidad Democrática y el Comando Venezuela, quienes además de participar en las gestiones por una solución, también contribuyeron con la hidratación y alimentación de los electores, a objeto de que estos no renunciarán a su cometido.
Uno de los miembros de mesa explicó a los electores que el llenado de la planilla debía ser lo más cuidadoso posible, ya que de salirse del espacio destinado para marcar, el voto podría ser considerado como nulo.
Las acusaciones de un supuesto “plan morrocoy” a través de la estación de información a los electores, donde estos recibían información sobre la mesa a la cual debían asistir, así como del número de pagina y renglón en el cuaderno electoral, también salpicó al centro de votación instalado en la sede del Colegio de Abogados del estado Lara, sin embargo, a las cinco de la tarde el centro no presentaba fila de electores a sus puertas, las cuales se encontraban abiertas a la espera de la hora ordenada para el cierre.
Fotos: Ricardo Marapacuto