El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, regresó el sábado a su residencia privada para continuar su proceso de recuperación y ejerciendo sus funciones, tres días después de la intervención quirúrgica en la que le fue extirpada la glándula prostática por un tumor cancerígeno.
El tumor que se le extirpó al mandatario el miércoles estaba limitado a la próstata y la biopsia comprobó que no se extendió a otras zonas, de acuerdo con el informe de los médicos.
«Ya como ven de regreso a casa, tal vez una de las sensaciones más agradables que puede uno tener después de esta experiencia», dijo Santos al abandonar la clínica con destino a la residencia privada ubicada en la sede de la Presidencia.
El mandatario agradeció a los médicos y enfermeras que lo atendieron, mientras que recomendó a hombres y mujeres someterse a exámenes de diagnóstico temprano de cáncer de próstata y de seno.
«Yo logré salvar mi vida, porque ayer se reconfirmó que el tumor no hizo metástasis (…), en todos los ganglios hicieron un examen y no hay rastros de cáncer, o sea que estoy totalmente curado», declaró el mandatario quien abandonó la clínica caminando por sus propios medios.
El urólogo especializado en oncología Felipe Gómez, quien operó a Santos, dijo que aunque el presidente no estará incapacitado, estará limitado para viajar o realizar esfuerzos físicos a fin de garantizar su completa y pronta recuperación.
Desde un comienzo los médicos descartaron la necesidad de someter a Santos a tratamientos complementarios de quimioterapia o radioterapia.
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