El candidato presidencial, Henrique Capriles Radonski ha realizado una campaña presidencial por todo el país llevando su mensaje, primero casa por casa y ahora pueblo por pueblo. Mientras él recorre cada estado del país desde los medios oficiales y de boca del mismo candidato a la reelección muchas han sido las críticas y descalificaciones que ha tenido que enfrentar, pero desde su gestión como presidente del extinto Congreso, como alcalde de Baruta y como Gobernador de Miranda hay muchas labores que se le adjudican en su carrera como gerente y político. A continuación un recuento de lo más criticado y reconocido del aspirante a Miraflores más joven de la historia política del país.
¿Qué se le reprocha?
Que no esté casado, desde que el candidato opositor finalizó su conocida relación con la animadora Erika de la Vega, no ha demostrado gran capacidad para establecer compromisos afectivos de pareja, con nadie de manera importante hasta el momento. Ha habido rumores sobre relaciones cortas con modelos, periodistas, sin que haya formalizado una relación, tampoco ha tenido hijos.
Este punto ha sido objeto de críticas, rumores y comentarios por factores del chavismo como de la oposición, pues cuestionan la decisión de Capriles de continuar hasta el momento en la soltería.
Discurso, en un país donde durante 14 años ha tenido un Presidente que se ha caracterizado por sus largas alocuciones de hasta 8 horas, el manejo de la palabra y la capacidad de desarrollar las ideas en un líder ha pasado a ser parte importante para los venezolanos.
Si bien es cierto, Capriles ha mostrado su plan de Gobierno y ha dejado claro su visión de país, no se ha caracterizado por largas alocuciones, generalmente sus actos de campaña no exceden de media hora, y durante sus visitas “pueblo por pueblo” en todo el país ha tenido un contacto cara a cara con los electores.
Ante esto, Capriles ha salido al paso y ha sido enfático al decir: “el que habla mucho, poco hace y el que habla poco, trabaja mucho, no seré el Presidente que hable horas y horas sin que resuelva los problemas del pueblo, yo no vine a hablar, he venido a trabajar con todos para tener una mejor Venezuela.
Embajada de Cuba, Durante los sucesos de abril de 2012, la Embajada de Cuba en Venezuela fue objeto de manifestación, se produjeron actos de intimidación por parte de adversos al gobierno de Chávez, contra el personal. Algunas de las acciones vandálicas tomadas contra dicha embajada fueron: la destrucción de autos del personal diplomático, el cese del suministro de los servicios de electricidad y de agua.
Capriles, quien para ese entonces era alcalde del municipio Baruta se hizo presente al lugar, con la intención de solicitar al embajador cubano, Germán Sánchez Otero, la inspección del edificio para comunicar a los manifestantes que no se encontraban funcionarios del gobierno de Chávez en carácter de asilados.
Sería acusado de haber irrumpido en la embajada, siendo absuelto por la prueba, presentada por la defensa, en donde se muestra una declaración del embajador noruego Dag Mork-Ulnes, quien alegó haber hablado con teléfono con su homólogo cubano, quien le respondió:
Muy amable que usted (Ulnes) haya ofrecido su asistencia, pero todo está bien aquí, estamos conversando los dos (Capriles y Sánchez), pero no hay necesidad de su intervención.
Capriles fue llevado a juicio en el 2004, acusado de haber irrumpido en la embajada, pero fue absuelto en el 2006. No obstante, en noviembre de 2008, el juicio fue reaperturado.
Sobre esta situación, Capriles ha dicho: “Yo estuve preso después de la situación que hubo allí, donde fui a calmar los ánimos de las personas que estaban afuera. El que no la debe no la teme, estuve en la cárcel y me calé 20 días en un cuarto. La cárcel cuando es injusta es doblemente dura”, expresó el aspirante de la derecha.
¿Qué se le adjudica?
Gestión en Baruta y Miranda con planes sociales de importancia en los sectores, educación, salud y vivienda, impulsado a que las comunidades se auto gestionen con la facilidad de créditos. En su programa de Gobierno, plantea la planificación, coordinación entre las distintas instancias de gobierno y la participación activa del sector privado, de las comunidades y de los beneficiarios.
Su juventud, ha sido un punto a su favor, ya que representa una figura nueva, sano y con fuerza para enfrentar lo que un nuevo gobierno tendría que enfrentar, luego de 14 años bajo el modelo de Hugo Chávez. Ha logrado el apoyo y la integración de los partidos como nunca otra figura de la oposición venezolana lo había logrado.
Lenguaje de la no confrontación, En su discurso no se evidencian muestras de ira, rabia u odio. Impulsa el entendimiento y la conciliación. Defiende el trabajo en equipo, se ha proyectado como alguien que busca mejorar lo que es. Ha demostrado creer en las alianzas, y se dejó ver en su reconciliación Con Leopoldo López.
«Mi gobierno no será el gobierno de un solo color, será un gobierno vinotinto, como la fusión del tricolor», ha dicho el candidato.
Representa la nueva política dejando atrás las figuras del pasado, A pesar de acompañar su candidatura, a la imagen de Capriles no se le relaciona con la vieja política que se hacía en el país, cuando sólo dos partidos gobernaban (COPEI-AD). Ha logrado calar en los jóvenes, adultos y mayores que no están de acuerdo con la forma en cómo se ha hecho política en el país.
Ideas progresistas claras tomadas de modelos Brasil y Chile: Cita ejemplos de los cambios, que a su juicio, se han producido en naciones de América Latina, Brasil y Colombia.
“Venezuela es el país que tiene menor inversión extranjera en América Latina”, dijo.
Inclusión de todos los sectores sin distinción política: No vamos a tener a las personas por colores políticos, porque no soy enemigo de nadie, yo soy enemigo de la violencia, soy enemigo de la falta de oportunidades, de los servicios públicos que no funcionan, de los que matan y secuestran”.
Carrera política brillante, que ha surgido desde su experiencia en el Congreso, luego como alcalde de Baruta, que ejerció este cargo durante dos períodos consecutivos: en las elecciones del 2000 contó con más del 60% de los votos y en 2004 fue ratificado en el cargo con casi el 80% del sufragio a su favor, y como gobernador del estado Miranda (2008-2012).