El Servicio Nacional Integrado de Administración Aduanera y Tributaria (Seniat) llevó a cabo este viernes, en dos sitios simultáneos, la mega jornada social con atención a las familias de clase media y de estratos bajos, con el propósito de ofrecerles productos de primera necesidad a precios solidarios.
En la sede de la Aduana Centroccidental, ubicada en la Zona Industrial I, al final de la avenida Antonio Benítez Méndez y en los alrededores de la Torre David, ocurrieron los operativos que contaron con puntos de ventas de víveres, verduras, charcutería, entre otros.
Diez toneladas de alimentos, en ambos puntos, fueron distribuidos entre las numerosas familias que acudieron para llevar lo necesario para el hogar. Los productos de mayor demanda fueron la leche en polvo, aceite de maíz, harina, huevos y lácteos.
Comunidades como Los Crepúsculos, El Carmen, La Victoria, Brisas de El Trompillo, La Cañada, Los Luises, La Peña, Barrio Unión, La Caldera, Andrés Eloy Blanco, entre otros sectores, fueron beneficiados con la jornada desarrollada en el oeste.
Mientras que al centro de Barquisimeto, asistieron ciudadanos provenientes de diferentes puntos del municipio. Aunque en el caso del centro, la mayoría de las personas acudieron para obtener o actualizar el Registro Único de Información Fiscal (RIF).
Asimismo, realizaron trámites vinculados al Registro Civil como es el acta de nacimiento, carta de residencia y fe de vida. Renovación de licencia para conducir, compras de teléfonos fijos y móviles, también captó la atención en gran número.
Mini exposición
La ocasión sirvió para que algunas mujeres y pequeños comerciantes, habitantes de comunidades humildes, expusieran parte de sus creaciones. Artesanías y dulces, ofrecieron con el fin de recaudar dinero para proyectos comunitarios y para el sustento propio.
Marina Arroyo, artesana, declaró que la preparación de la dulcería involucra a varios jóvenes de la comunidad donde vive, en el norte de Barquisimeto, “con el propósito de enseñarles un oficio y que busquen una manera honrada de ganarse la vida”, dijo.
Humberto Pérez, otro de los testimonios, plantea que “deberían existir espacios consagrados a la artesanía popular, no sólo en operativos especiales. Que las personas cuenten con una expoferia en la cual se admire el talento de casa y puedan comprar piezas a precios económicos”.
Fotos: Dedwison Álvarez
