El Programa de Creatividad Infantil Contemos bajo la Ceiba del Ateneo de Cabudare, sigue celebrando más de dos décadas de actividades ininterrumpidas. Esta vez, junto a Atelana Teatro, grupo que presentó una fantástica muestra de títeres, bajo la dirección de Mónico Bata.
La velada que se realizó el pasado sábado en el patio central de la institución ateneísta, comenzó con las palabras de bienvenida del profesor Benjamín Terán, presidente del Ateneo y amigo favorito de los pequeños seguidores de Contemos. Terán recordó que bajo la sombra del popular Jabillo, conocido como Ceiba, estuvo el joven que luego sería Simón El Libertador. El arbol es fiel testigo de la alegría, la sorpresa y los juegos que protagonizan todos los domingos, bajo su majestuosa sombra, los niños, niñas y familias de Cabudare, como también de las experiencias de cantidad de titiriteros, payasos, cuenta cuentos, zanqueros y magos.
Hoy día, cada domingo, al igual que hace 22 años, los niños siguen esperando al amigo del megáfono llamado Benjamín, quien otrora, anunciaba que todo estaba listo para comenzar la actividad en la cual soñarían, jugaría y cantarían todos los presentes. Ana Magaly Bracho, coordinadora de Desarrollo Infantil del Ateneo de Cabudare también ofreció una cálida bienvenida a los concurrentes. Es de mencionar que entre la audiencia se encontraban los queridos Tablón y Mascarilla, éste último recuperado totalmente luego de sufrir un ACV, lo que alegró bastante al público. En ocasión de la fiesta aniversario de Contemos se inauguró la colorida muestra de ilustraciones de Amine Joseph, quien realizó los dibujos de Cuentos del mar para niños.
El sueño de jacinto
Enseguida, Atelana Teatro descubrió el teatrino para que los títeres, que dieron vida al relato de Cuentos del mar para niños, contarán el sueño de Jacinto.
En medio de una atractiva escenografía, alusiva al fondo del mar, se desarrolló la historia que comenzó con la procesión de San Juan Bautista en una costa venezolana. Luego de que parecen Jacinto y Pastora danzando al son de los tambores, se devela el primer sueño de Jacinto, en el que una ballena y un tiburón entablan una bonita amistad.
En el segundo sueño de Jacinto se aprecia la historia de una foca, un cangrejo y un pulpo, quienes logran rescatar a un caballito de mar que estaba atrapado en el fondo del barco. La obra recordó el valor de la amistad, respeto, solidaridad y amor por los juegos tradicionales.
Fotos: Billy Castro
