Los comerciantes establecidos en Sarare, La Miel y otras poblaciones del municipio Simón Planas, se encuentran al borde de la ruina como consecuencia de los apagones que continuamente están sufriendo desde hace algún tiempo.
Magín Pérez, presidente de la Asociación de Comerciantes de esa entidad informó que el problema se agravó desde la pasada semana cuando se incrementó el número de suspensiones del suministro de electricidad sin que desde Corpoelec les aporten información alguna sobre los motivos de esa irregularidad.
Explicó Pérez que la pasada semana sufrieron apagones los días miércoles, viernes y domingo y en la que está concluyendo ocurrieron el martes y el viernes, este último día entre las seis de la tarde y casi las doce de la noche, además de que durante la mañana del sábado ya se habían producido varios de corta duración.
“Estos últimos son los que más daños nos causan, no sólo a nosotros los comerciantes sino también a las familias pues dañan los aparatos que funcionan con electricidad, como neveras, equipos de aire acondicionado, televisores y otros”, afirmó.
En lo que se refiere a los comerciantes, dijo que a causa del mismo problema se pierden los alimentos que requieren refrigeración, resultando los carniceros los más perjudicados, así como las empresas que trabajan de manera continua.
A eso se agrega el que, aprovechando la oscuridad, los ladrones les atracan, agregó.
“Hemos denunciado el caso en Corpoelec pero no hacen nada, y si la situación continúa tendremos que protestar en la calle porque no aguantamos más”, enfatizó Pérez.