Vecinos de la comunidad Enmanuel, cerraron la avenida Circunvalación Norte, a la altura del sector Macías Mujica, en reclamo a la empresa Oriven contratada por el Ministerio (pp) del Ambiente, a propósito de la Matriz Norte que se construye para el suministro de agua a las comunidades de las parroquias El Cují y Tamaca.
Antes de las 9.00 de la mañana, impidieron el paso de vehículos de cargas pesadas y livianos, en señal de protesta. Florentina Cobis, vecina, declaró que la contratista abrió una zanja para colocar la tubería y, “de la noche a la mañana”, paralizaron los trabajos. Ahora los niños del sector corren el riesgo de caer en esa especie de cuneta.
A la manifestación de los vecinos, se sumaron los obreros de la empresa contratada, debido al incumplimiento en el pago de sus labores.
Comunidad y trabajadores fueron una sola fuerza a objeto de conseguir sus propósitos: la continuación del proyecto hidráulico y una justa remuneración.
“Fue la misma empresa, en la figura del señor Rafael Pereira, quien mandó a los trabajadores a cumplir horario porque los trabajos no iban a continuar”, aseguró Víctor Zapata, dirigente del Sindicato Bolivariano de la Construcción en el estado Lara.
Más de cinco horas duró la protesta que ocasionó unos dos kilómetros de colas de vehículos, en el sentido este-oeste.
Edgar Torrealba, otro de los vecinos, lamentó que a pesar de tratarse de un proyecto tan importante, existan retrasos como los expuestos en la manifestación.
“Si uno de los niños, cae en la zanja, ¿quién responde? No pueden jugar con la integridad de nuestra gente”, denunció.
Un problema tras otro
Sin embargo, hay otras razones para la molestia vecinal. En el sector Enmanuel y comunidades vecinas, los servicios públicos funcionan de forma clandestina, desmejorando la calidad de vida. No cuentan con agua por tuberías, ni conexiones de cloacas. La electricidad funciona de manera improvisada, con postes hechos de madera y cables de alta tensión, colgando de un lado a otro, que ponen en riesgo a grandes y chicos.
“La Alcaldía no se interesa por nosotros, sólo les preocupa el este de la ciudad; los pobres de Enmanuel, Los Sin Techo, El Trompillo, entre otros, no cuentan para ninguna autoridad”, informó.
Finalmente, solicitan la construcción de una pasarela que permita cruzar la peligrosa avenida, de un lado a otro, sin poner en peligro a ninguno de los habitantes. Varios vecinos han resultado arrollados, al tratar de cruzar la calle.
Sin embargo, ninguno de los gobernantes ofrece la ayuda en este sentido, causando mayor desesperanza entre los residentes. Las madres, con niños en brazo, pasan luego que circulan los vehículos a toda velocidad; hacen una parada obligatoria en los muros de separación vial para protegerse de los automotores, sintiendo una escalofriante inseguridad de ser alcanzado por alguna de las unidades en marcha.
Fotos: Jairo Nieto