La tradición es una característica común a todas las sociedades, y prácticamente lo que mantiene su continuidad es la circunstancia de que va de generación en generación. Tradición viene del latín traditio, que significa transmisión. En este caso, las tradiciones religiosas se van transmitiendo a través del tiempo.
En la biblia, además, las tradiciones religiosas están integradas en el conjunto de las tradiciones humanas; indiscutiblemente que el pueblo de Dios en su antigua ley, conserva y transmite un depósito sagrado. En este conjunto de valores, experiencias, enseñanzas de fe, se recogen los recuerdos de la historia, creencias, oraciones, ritos, sabiduría y leyes.
Ese conjunto de valores y enseñanzas es sagrado porque tiene un origen divino, por cuanto en la base de esa gran creencia hay una revelación transmitida por los enviados de Yahvé.
Esa tradición religiosa conlleva dos elementos en sí misma. Por una parte, una dimensión de estabilidad, como lo permanente y una segunda dimensión de progresos. Por cuanto la revelación misma es mejor comprendida, lo cual significa un desarrollo que además será aplicado a circunstancias diferentes, siguiendo la marcha de la historia, pero siendo siempre aquella misma revelación que no se somete a la relatividad. Por supuesto que es la forma literaria, la que permite ante todo la transmisión y el uso, lo que le da sentido de tradición y aún cuando existen dimensiones comunes con otras culturas, la cultura del pueblo de Dios, tiene características propias, en el contenido de un enfoque general diferente.
Ahora bien, los contenidos de tradición se transmiten fundamentalmente por vía oral, bajo relatos religiosos, en las fiestas rituales; también a través de formas jurídicas, sentencias de los sabios del pueblo. Pero esa tradición oral hace que nazcan textos escritos, en donde se ubica la Sagrada Escritura. Pero paralelamente a esta escritura permanece una tradición oral, que se vincula mucho, entre otros aspectos, en la relación maestro-discípulo.
Jesucristo manifiesta su autonomía frente a la tradición judía de la época. El insiste en que la Ley y los profetas no se deben abolir sino cumplirlos. Pero Él, se comporta como un maestro que enseña, no como los escribas, sino como alguien que tiene autoridad. En la Iglesia, se comprueba la existencia de esa tradición, sobre todo en San Pablo, quien invita a los tesalonicenses, diciéndoles: “Por tanto hermanos, manténganse firmes y guarden las enseñanzas que han recibido de nosotros, ya de palabra, ya por escrito” (Tesalonicenses 2,15). El objetivo de la tradición apostólica, hace referencia tanto a los actos como a las palabras. Todo esto hace pensar que la materia de transmisión de esa tradición, antes y después de Pablo fueron sometidos a una técnica transmisora parecida a la de la tradición judía.
De tal manera que las colecciones evangélicas, consigna por escrito una tradición que ya existía, el estudio de la tradición de los Apóstoles, implica un cuidado muy especial a los géneros literarios en el Nuevo Testamento. Cristo habla y actúa, dando una interpretación a las Antiguas Escritura “Saben que se dijo a los antiguos, no matarás y el que mate será reo de juicio, pero yo les digo el que se enoje con su hermano será reo de su juicio” (Mateo 5, 21-22). Él los instruye acerca de los que debía enseñar en su nombre; Él les da ejemplo de lo que deben hacer (Juan 13,15). Y como la tradición Apostólica debe conservar la imprenta de Cristo, Él da autoridad a sus Apóstoles “El que los escucha, me escucha, el que los rechaza, me rechaza y rechaza aquel que me ha enviado (Lucas 10,46).
El depósito de la tradición apostólica no puede recibir elementos nuevos fuera de Cristo; en ese sentido la revelación está en la historia, que lo que hace es explicar las potencialidades contenidas en ese nuevo depósito apostólico.
La tradición de la Iglesia se transmite en una sociedad estructural, pero que es el cuerpo Místico de Cristo, dirigido por su espíritu.
Entonces el criterio del depósito Apostólico como Revelación no está solo en la escritura, sino, que la revelación se da también en la tradición. Pues bien, esa tradición merece todo nuestro respeto y acatamiento, pero no se debe confundir esto con cualquier expresión cultural de esa época, o un capricho religioso, sin soporte de fe, ni vinculación con la escritura o la tradición apostólica. La tradición no es cualquier manifestación cultural. La “tradición y la escritura”, están estrechamente unidad y compenetradas, mana de la misma fuente, se unen en el mismo caudal, van hacia el mismo fin.
La Sagrada Escritura es la Palabra de Dios en cuanto escrita por inspiración del Espíritu Santo. La tradición recibe la palabra de Dios, encomendada por Cristo y el Espíritu Santo a los Apóstoles y la transmite íntegra a los sucesores, para que ellos iluminados por el Espíritu de la verdad, la conserven, la expongan y la difundan fielmente en su predicación (Constitución del Verbum 9).
Deben leer la Biblia, usarla más en las parroquias, en los grupos de apostolado seglar, en los hogares y también tomar en cuenta los dogmas de nuestra fe católica, contenidos en el credo. La revelación está en la tradición o dogmática de nuestra Iglesia.
Recordemos una vez más las advertencias de Cristo, a fin de valorar la verdadera tradición, de aquella que es falsa. “Este pueblo me honra con los labios, pero su corazón está lejos de mí… dejan los Mandamiento de Dios y se aferran a la tradición de los hombres (Marcos 7, 5-8)
Mons. Antonio José López Castillo
Arzobispo de Barquisimeto
La Iglesia Católica se solidariza con los que sufren
Caracas, 27de agosto de 2012.- La Conferencia Episcopal de Venezuela a través de la Red de Cáritas, promueve una campaña de solidaridad con los hermanos que sufren, y exhorta a todos los venezolanos y venezolanas a ofrecer su contribución, que será enviada a la zonas afectadas y ejecutadas a través de las Cáritas locales, que desde ya están activadas atendiendo humanitariamente a todas las personas. Esta campaña nos permitirá responder a las nuevas emergencias, tanto de las continuas lluvias acaecidas en nuestro País, como a la causada por la situación de la emergencia presentada este sábado 25 de agosto en la Refinería de Amuay y que causó graves daños a un gran número de la población paraguanera, por tal motivo hemos abiertos centros de acopio para recibir el generoso aporte de los venezolanos.
Para colaborar con estos hermanos en la ciudad capital abrimos nuestro centro de acopio en la sede de la Conferencia Episcopal Venezolana, en Montalbán, así mismo hemos activados las Cáritas de Punto Fijo, Coro, Caracas, Maracay, Cumaná, San Felipe, Barquisimeto, Los Teques, Puerto Cabello, entre otras. Los requerimientos más urgentes son colchonetas, agua potable y alimentos no perecederos como pasta, harina pan, atún, sardinas, leche en polvo, arroz y granos. Y para formar kits de limpieza requerimos de jabón de baño, crema dental y cepillos de diente, así como también pañales y toallas sanitarias en todas las tallas. Igualmente se requiere de gasas, suero fisiológico, alcohol, crema protosulfil, derain fórmulas maternas, leche completa, teteros.
Recordamos que la Red de Cáritas estará al servicio de los damnificados, en todo el país y de manera permanente, hasta que cese esta contingencia. También se puede realizar cualquier donativo gracias a la plataforma tecnológica brindada por el Mercantil Banco Universal, a través de Mercantil en Línea, Un Aporte por Venezuela, en el módulo Transferencias y Pagos; o en las oficinas Mercantil Banco Universal depositando en nuestro número de Cuenta Corriente 0105- 0699- 9216- 9905- 9454, a nombre de la Asociación Civil Cáritas de Venezuela; o a través de nuestra Cuenta de Ahorro del Banco Provincial número 0108- 0032- 3102- 00000- 492. Y recuerden que cualquier aporte realizado a la institución puede ser deducido del impuesto sobre la renta.
Desde la Red de Cáritas, queremos hacernos solidarios y ser puente para aquellas empresas que deseen colaborar y hacer llegar su colaboración a las personas afectadas.
Al mismo tiempo promovemos un espacio de oración por los hermanos que perdieron la vida y por los familiares, para que el Dios de la Vida les dé fortaleza para salir de este terrible acontecimiento.
Centros de acopio en Barquisimeto:
-Cáritas de Barquisimeto: carrera 18 entre calles 34 y 35 telf.: 0251-4468402
-Projumi: carrera 18 esquina calle 30. Telf.-. 0251-2327219
-Parroquia Santa Rosa de Lima, Santuario de la Divina Pastora: Santa Rosa Telf.: 0251-2533769
Gracias por su atención y ¡Ayúdanos a Ayudar!
Iglesia en marcha
Reunión pastoral Mariana este lunes 03/09 a las 3pm en Centro Pastoral Benítez.
Cáritas informa: Inicia 3era temporada de cursos – pintura en madera, peluquería, inglés, computación adultos, pasapalos, macramé, peluquería, tejido en ganchillo-. Telf: 0251-4468402. Car. 18 / calles 34 y 35. Horario de Oficina
Gran domingo familiar a beneficio de la construcción del Templo Divino Niño de El Trigal. Lugar: terreno del complejo parroquial, Urb. El Trigal. Av. El Placer. Hoy 02/09 de 10a.m. a 6 p.m. (comidas, rifas, brinca brinca, pinta caritas, grupos de música, bingo y mucho más)
Gran bingo solidario a beneficio de las obras de la Iglesia El Salvador, el 29/09/12 a partir de las 2 p.m. Centro Pastoral Mons. Benítez, Av. Libertador, telf.: 0251-2522827
-El Centro de Atención a la Familia de la Pastoral Familiar, asesora a personas, parejas y/o familias que requieran apoyo para resolver sus conflictos familiares. Citas: 0251-7190050
Peregrinación
La Sociedad Divina Pastora de Barquisimeto invita a:
Peregrinación a pie para Santa Rosa el sábado 08/09 a las 5:00 am, en homenaje a los 125 años de la Sociedad Divina Pastora -partiendo de la sede de la sociedad en la carrera 22 entre 24 y 25 frente a San José-
Taller
Taller Vivencial: “Perdonar” -Ligeros de Equipaje- Herramientas para Perdonar sin humillarnos y sentirnos bien. Facilitadores: Mayida Chaaban y P. José Pastor Aguilar. Fecha 22/09, lugar: Salón Librería Paulinas. Hora: 8:30 a 12:30. Inversión 100 p/persona. Telf. 02514155689 y 04145369533
Concierto
El Santuario del Nazareno de los Rastrojos, invita al concierto de alabanza y oración con los padres Aly Villegas y Gilmer Oviedo, el domingo 16/09 en la Clínica del Alma 3:00 p.m. Pro-fondos para asistir a la JMJ 2013. Colaboración Bs. 40. entradas a la venta en la Librerías Paulinas y Zapatería New Record (Av. 20 /calles 23 y 24) Inf.: 0426-5531043
Santo Padre
Benedicto XVI se solidariza con las víctimas de la explosión de la refinería de Amuay
en Venezuela
El pontífice envió un telegrama de pésame al presidente de la Conferencia Episcopal
CIUDAD DEL VATICANO, martes 28 agosto 2012 (ZENIT.org).- Benedicto XVI ha enviado un telegrama de pésame por las numerosas víctimas de la explosión que tuvo lugar en la refinería petrolera de Amuay, Venezuela.
El telegrama fue enviado ayer por el papa, a través del secretario de Estado vaticano, cardenal Tarcisio Bertone, dirigido al arzobispo de Cumaná y presidente de la Conferencia Episcopal Venezolana, monseñor Diego Rafael Padrón Sánchez.
En su telegrama, el pontífice se muestra “profundamente apenado por la noticia del grave accidente en la refinería de Amuay, estado Falcón, que ha provocado numerosas víctimas y daños materiales”.
Así mismo, “ofrece sufragios al Señor por el eterno descanso de los fallecidos, al mismo tiempo que desea expresar su paternal cercanía espiritual a los heridos, así como a los damnificados y sus familiares”.
En su mensaje, Benedicto XVI alienta también “a toda la comunidad civil y eclesial de Venezuela a prestar con caridad y espíritu de solidaridad cristiana la necesaria ayuda a cuantos han perdido sus hogares o sus bienes personales”.
Con estos sentimientos, el santo padre “imparte a los afectados y a cuantos les socorren la confortadora bendición apostólica, como signo de afecto al querido pueblo venezolano”.
Foto: Cortesía