En el oeste de Barquisimeto el barrio la Batalla está cada vez peor, debido a la falta de atención de los gobiernos municipal y regional. Los habitantes sienten profundo pesar por el progresivo deterioro de las calles, aceras y otros espacios comunitarios.
Dar un recorrido por el sector, es constatar la falta de acción gubernamental; no hay rastros de obras ni de mejoras. Los habitantes con frecuencia se preguntan ¿Olvidaron La Batalla?.
Los huecos, dispersos en la totalidad de las calles, es lo que más preocupa entre los conurbanos. Carros particulares y del transporte público, sufren daños en el tren delantero y neumáticos a causa de los cráteres formados sobre el asfalto.
En este sentido, exhortan a la Empresa Municipal de Infraestructura y Conservación del Ambiente (Emica) a fin de que ejecuten un plan de rehabilitación vial en la zona, de lo contrario, el vecindario seguirá exhibiendo abandono.
Yerni Acosta, habitante, declaró que en reiteradas oportunidades los consejos comunales han solicitado el mejoramiento de la vialidad pero no acuden las cuadrillas de reparación y las consencuencias están a la vista de todos: las calles no sirven.
Aunado a la falta de atención vial, resaltan las fallas en la recolección de basura. Desperdicios vistos por doquier, ofrecen una imagen negativa de la comunidad, lo cual que angustia a los moradores.
Tampco el Instituto del Aseo Urbano ha escuchado las solicitudes de los vecinos, cada día son más los desechos acumulados frente a las viviendes y otros espacios del barrio.
Olores desagradables y proliferación de alimañas, es otra de las incomodidades que afectan a los residentes de La Batalla, en la parroquia Juan de Villegas. “El aseo no pasa y las personas arrojan la basura a la quebrada”, dijo la ss Acosta.
A propósito de las quebradas, es importante canalizarla, a la altura del sector uno, porque con los aguaceros recientes se desborda hacia los hogares más cercanos al buco.
Pequeñas y medianas inundaciones sufren las familias que tienen hasta 30 años viviendo en el popular sector, el cual colinda con los barrios El Tostao y El Bolívar.
Hace un par de años, aproximadamente, fue el último saneamiento que recibió la quebrada. Desde entonces la maleza y animales abundan en la canal y sus alrededores, de allí la preocupación que manifiestan los vecinos. Esperan que Emica e Imaubar coordinen trabajos en conjunto.
Fotos: Elías Rodríguez