“En Guamacire se vive muy bien, en el campo, al lado del río y la montaña, todavía con seguridad, pero nos hacen falta vías de comunicación para entrar o salir”, dijo Karelis Peraza, del consejo comunal Naciente Guamacire, del caserío que, si bien pertenece a la parroquia Juares de Iribarren, está más ligado a Palavecino.
Se trata de una comunidad con cerca de mil familias cuya entrada principal está por Agua Viva o Las Cuibas, Palavecino, aunque también pueden hacerlo por El Manzano, siempre y cuando el río Claro se los permita.
Como ha ocurrido en otras oportunidades, esta semana quedaron incomunicados debido a que la quebrada que cae al río destruyó dos pasos del camino.
“Eso pasa cada vez que llueve fuerte en la parte de arriba, en la montaña, que la quebrada se lleva la carretera y quedamos aislados”, dijo Karelis mientras esperaba un mototaxista que la sacara hasta Las Cuibas o Agua Viva.
Explicó que como pertenecen a la parroquia Juares deben trasladarse hasta Río Claro para tramitar cualquier documento en la junta parroquial.
“Si el río lleva agua no podemos pasar hacia El Manzano y tenemos que llegar a Cabudare y después a Barquisimeto para coger un carro y llegar a Río Claro y al regreso el mismo recorrido”, explicó.
Lisbeth Pérez, otra vecina, se unió al llamado para que desde Invilara o la alcaldía de Iribarren les reparen las vías.
Esta misma semana una comisión de Invilara estuvo en el sitio donde se partió la carretera y tomó medidas para decidir lo que se deba hacer, por ahora construir una batea, aunque todo depende de la disponibilidad de recursos.
Mientras tanto, los mismos vecinos acondicionan parcialmente el paso para no seguir incomunicados.
Pero en Guamacire también necesitan un acueducto pues el agua que reciben no es tratada, viene directamente por gravedad desde la montaña.
Las familias están obligadas a comprar los botellones para tener agua que tomar, pero como los camiones repartidores no pueden llegar, cada quien debe llevarlos a sus casas.
Guillermo Cañizales, también del consejo comunal Naciente Guamacire, aboga igualmente por la vialidad pues debido a su mal estado no disponen de servicio de transporte colectivo y deben caminar mucho para llegar hasta Cabudare.
Igualmente pidió reponer los bombillos quemados de las calles y que, aunque sea de vez en cuando, la policía o la GN se den su pasadita para que los delincuentes no ingresen
Antonio Yépez, de consejo comunal Hombres de Maíz, insistió en la necesidad de una vía en buenas condiciones para entrar o salir de Guamacire, por Agua Viva o por El Manzano, aunque por este último sector sería necesario un puente sobre el río.
Aquí también es necesario proteger la tubería que lleva agua hasta los tanques ubicados en El Manzano pues con un derrumbe de la carretera también se podría ir la misma.
En general, Karelis Peraza, Lisbeth Pérez, Guillermo Cañizales, del consejo comunal Nacientes Guamacire, y Antonio Yépez, de Hombres del Maíz, junto a las cerca de mil familias que representan, están dispuestos a acudir a las instancias que sean necesarias para que les solucionen el principal problema que confrontan como es el de la vialidad.
“No nos importa si es la alcaldía o la gobernación, lo importante es que hagan algo por nosotros, por la carreterita y las calles, que también vamos a votar el 7 de octubre”, dijo una de las dirigentes.
Fotos: Elías Rodríguez