La jueza María Lourdes Afiuni fue trasladada este martes en la mañana al Hospital de Clínicas Caracas, donde es sometida a exámenes preoperatorios para la intervención quirúrgica de este miércoles.
José Amalio Graterol, abogado de Afiuni, especificó que su defendida se someterá a una «corrección de una incontinencia urinaria» y se operará de un prolapso de vejiga y rectal, debiendo estar hospitalizada hasta el sábado o domingo.
El abogado dijo que ha sido «un lucha» de un año y medio conseguir que la jueza, bajo arresto domiciliario desde febrero de 2011, pudiera trasladarse al «hospital de su confianza y visitarse con su médico de confianza».
«Realmente pensamos que es un gesto de buena voluntad de la juez», indicó Graterol aunque apuntó que el hecho de que se le haya permitido ingresar al hospital justo un mes y medio antes de las elecciones tiene otra lectura también para la defensa.
«Puede ser una forma de ganar tiempo para evitar iniciar el juicio antes de las elecciones presidenciales» del próximo 7 de octubre, dijo el abogado.
Graterol señaló también que quizás la juez del caso, Marilda Ríos, la novena que ha tenido la magistrada, «no se atreve a realizar el juicio».
El pasado 17 de julio, la organización humanitaria Human Rights Watch (HRW) señaló en un informe que el caso de Afiuni es «el ejemplo más alarmante de la falta de independencia judicial en Venezuela», y de cómo el Gobierno de Chávez ha «neutralizado» al poder judicial como garante de los derechos.
Otros organismos internacionales de derechos humanos, entre ellos Amnistía Internacional (AI), han solicitado a las autoridades venezolanas la liberación de Afiuni alegando que en este caso hay una «indebida interferencia política» por parte del Ejecutivo.