El Parque Recreacional de la Urbanización Chucho Briceño, permaneció por casi dos décadas abandonado hasta que luego de tres años de gestión del alcalde Richard Coroba, se gestionó su rehabilitación integral.
No obstante, a menos de seis meses que la instancia municipal entregara el parque a los consejos comunales del sector, en donde se invirtieron un millón 300 mil bolívares, exhibe marcado deterioro.
Emblemática cancha
La cancha de fútbol y voleibol de playa, única en Lara, según declaraciones del propio alcalde Coroba y anunciada como obra emblemática para la jurisdicción, hoy está ahogada en una gran laguna.
La arena de playa desapareció, compactándose en un gran piso sólido por la ausencia de mantenimiento.
Aun así, los niños y escolares de las zonas circunvecinas, juegan en esas condiciones.
En ese sentido, el profesor Abrahán Granados, dirigente deportivo del municipio, reconoció que la infraestructura es una de las más importantes de Palavecino, mas “no se puede construir para sólo mostrar una obra y desecharla”.
-Como muestras tenemos el Estadio de Agua Viva, en donde la alcaldía techó la cancha pero la abandonó, la cancha de Coco e’ Mono, La Morenera y pare de contar, detalló Granados.
Refirió que debido al nulo mantenimiento, en el Parque de Chucho Briceño, se perdió la cancha de fútbol y voleibol de playa, “porque eso amerita disponer de varios trabajadores que hagan el barrido constante de la arena”
Monte por doquier
El parque tiene muchos espacios verdes, en donde la alcaldía ha sembrado grama y jardines ornamentales que hoy están reemplazados por abundante maleza.
Los parques infantiles o de bolsillo, están invadidos por el monte, achicándose los espacios de disfrute por la larga maleza.
Sin luminarias
El parque ya cuenta con un buen número de luminarias partidas, sin luz.
El parque debería tener cerca de 20 bancos, pero solamente menos de una docena fueron instalados.
Debería privatizarse
Según María Bastidas, habitante de la vecina Urbanización Terepaima, acotó que diariamente unas 150 personas visitan el espacio, por tal razón ya se observa menoscabo en sus instalaciones.
-Si la alcaldía lo entrega formalmente a los consejos comunales, deberían cobrar una cuota para el mantenimiento, subrayó, adicionando que la alcaldía o el Estado no puede encargarse del cosas tan menudas pero que generan gastos.
El gimnasio también está maltratado y las arquerías ya no tienen malla. Es imperante actuar antes que el parque se hunda en el abandono.
Fotos: Luis Alberto Perozo Padua
