El lanzador Félix Hernández, de los Marineros de Seattle, lanzó el juego perfecto número 23 en la historia del béisbol de las Grandes Ligas entre 1880 y 2012, se convirtió en el primer criollo en completar uno a ese nivel y el segundo latinoamericano tras el nicaragüense Dennis Martínez (28-7-1991 con Montreal), en victoria 1-0 frente a los Rays de Tampa Bay, en el estadio Safeco Field de Seattle.
Hernández dominó a los 27 bateadores que enfrentó con 12 ponches y además logró ser el quinto venezolano que completa un juego sin hits ni carreras tras Wilson Álvarez (Medias Blancas de Chicago), el 11 de agosto de 1991, Aníbal Sánchez (Marlins de Florida) el 6 de septiembre de 2006, Carlos Zambrano (Cachorros de Chicago) el 14 de septiembre de 2008 y Johan Santana (Mets de Nueva York) el primero de junio de este año.
El carabobeño logró el juego perfecto 14 en la historia de la Liga Americana. El primero fue lanzado por Cy Young el 5 de mayo de 1904. Fue además el tercer juego de este tipo en lo que va de 2012, cifra récord para una sola temporada, tras los de Phillip Humber (Medias Blancas de Chicago) el 21 de abril ante Seattle en el mismo Safeco Field y el de Matt Cain (Gigantes de San Francisco) el 13 de junio contra los Astros de Houston
Por si fuera poco, fue el sexto juego sin hits ni carreras de la temporada si a las gemas de Cain y Humber se suman los no hit no runs de Santana, Jered Weaver (Angelinos de Los Ángeles) el pasado 2 de mayo ante los Mellizos de Minnesota y el combinado entre seis lanzadores de Seattle el pasado 8 de junio contra los Dodgers de Los Ángeles.
Hernández (11-5, 2.60 de efectividad) es además el segundo jugador que ha vestido el uniforme de los Cardenales de Lara y ha logrado luego un juego perfecto en las Grandes Ligas, algo que hizo Roy Halladay (Filis de Filadelfia), importado de los pájaros rojos en la década de los noventa, el 29 de mayo de 2010, frente a los Marlins de Florida.
“Yo no tengo palabra alguna para explicar esto. Estuve trabajando muy duro para poder lanzar un juego perfecto algún día y este de hoy, es para ustedes. (Hacerlo) estuvo en mi mente durante todo el partido, desde el tercer inning. Cuando vi el de Phillip Humber dije que algún día tenía que lograrlo aquí”, declaró un emocionado Hernández a la afición tras el juego, al reconocer que ningún miembro de su familia se encontraba en el país para celebrar y los espera en las próximas horas.
Su nivel de dominio sobre los rivales ha sido sobresaliente. No pierde desde el pasado 12 de junio contra San Diego y, desde entonces, compila foja de 7-0 con 1.56 de efectividad. En 92.1 innings le han conectado 58 hits, le han fabricado 17 carreras, 16 de ellas limpias, ha otorgado 15 boletos y ha ponchado a 90 bateadores. Incluye cuatro blanqueos. Esta vez ponchó a 12 para unir su hito a su condición del premio Cy Young en la Liga Americana.
El recorrido
“Nunca tuvo problemas. Siguió haciendo buenos pitcheos. En el último turno, abajo 2-0, mantuvo su confianza. Fue impresionante”, dijo el catcher John Jaso. En los primeros cinco innings sólo se preocupó por un fly profundo de Sam Fuld en el primer tramo como primer batador y que fue atrapado por Eric Thames en la zona de seguridad o una línea de Evan Longoria en el quinto que fue directo hacia el segunda base Dustin Ackley.
Al llegar al sexto ponchó a los tres bateadores y concluyó con apenas 69 envíos. En el séptimo, el manager de Tampa Bay, Joe Maddon, fue expulsado por discutir las cuentas de bolas y strikes luego de dos outs, tras el primer strike lanzado a Matt Joyce. Joyce llegó a 3-2 antes de fallar.
En el octavo, el criollo demostró que su enfoque seguía allí. Ponchó a Evan Longoria con un envío quebrado y luego lo repitió ante Ben Zobrist y Carlos Peña. Sólo cinco de sus 27 outs fueron con batazos elevados, 12 con ponches y 10 por rollings al infield. Jeremy Hellickson (7-8) cargó con la derrota. Brendan Ryan anotó la carrera por hit al left de Jesús Montero en el tercer inning.
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