A través de una llamada telefónica de un usuario quien se sorprendió al entrar al Instituto de Previsión y Asistencia Social del Personal del Ministerio de Educación (Ipasme), ya que los botes de agua colapsaron este espacio para la salud.
El servicio médico permanente en lo que es medicina general, traumatología, radiología, sala de curas y tratamiento, estaba inundado de agua. De igual manera ocurrió con el departamento de seguridad de esta institución social.
El director del Ipasme, licenciado Marcos Coronel comentó que este incidente que ocurrió no debe alarmar ni al colectivo barquisimetano, ni a los trabajadores de la institución.
“Estamos haciendo un estudio y localizando los planos totales del edificio, buscamos un diagnóstico para una solución definitiva a esta problemática”, comentó Marcos Coronel.
“Es un bote de agua superficial y hay que esperar las medidas correspondientes. Aquí están con nosotros los representantes de Saneamiento Ambiental y Contraloría Sanitaria, quienes nos recomiendan que sólo por hoy (ayer) se deje de trabajar, para poder aplicar una solución eficaz”, dijo.
Destacó que el edificio se empezó a realizar en 1981 y se inauguró en 1983, son más de 30 años construido y que éste amerita una inspección y mantenimiento constante.
El trabajo que se llevará a cabo es el de destape y limpieza de las tuberías con cloro y una fumigación preventiva.
Tanto los representantes de Saneamiento Ambiental, Contraloría Sanitaria, así como del Ipasme, hicieron un llamado a las cuadrillas de Hidrolara, para que dieran una mano en esta situación, que aunque no es compleja, se pudiera complicar en cualquier momento si no se atiende a tiempo.
De la misma manera se pudo conocer que hay una tanquilla externa la cual se colapsa siempre y que de alguna u otra forma, también está conectada con las del Ipasme.
En esta tanquilla externa, los habitantes del sector lanzan papeles, objetos, que logran obstruirla con facilidad, y que por ende conduce al caos, ya que no se limpian con frecuencia.
Para el día de hoy el Ipasme abrirá sus puertas de par en par y seguirá atendiendo a todos aquellos docentes que necesiten los servicios médicos.
Ayer se tomaron en cuenta todas las medidas correspondientes, para poder solventar la situación que se presentó y la cual causó molestias tanto a usuarios como al personal que allí labora.
Otra de las denuncias que se pudo conocer es que la empresa de mantenimiento del Ipasme no les cancelan y piden que se les pague lo antes posible.
Fotos: Jairo Nieto