El cubano Dayron Robles abandonó en la final de los 110 metros con vallas, en la que defendía su título olímpico, y el brasileño César Cielo perdió por primera vez en más de cuatro años la prueba de 50 metros libres en la piscina.
Estas decepciones junto a la pobre cosecha de medallas de Argentina, que no se benefició en las últimas instancias de los logros en deportes por equipos como en Atenas 2004 y hace cuatro años en Pekín, potencian el desafío para América Latina en Río de Janeiro en 2016.
Con un nuevo récord nacional de 17 medallas, el próximo anfitrión Brasil se desempeñó bien aunque no donde se esperaba -como el oro en fútbol y voleibol masculino- sino con sorpresas en deportes en los que no había garantías de llegar al podio.
«Así como hay sorpresas negativas, también las hay positivas», dijo as Reuters el jefe de la delegación brasileña, Bernard Rajzman.
Brasil buscará mucho más que tres preseas de oro, cinco de plata y nueve de bronce cuando Río organice los Juegos en 2016.
El país más grande y con mayor cantidad de habitantes de la región quedó decepcionado por los pobres resultados de sus atletas en los deportes en los cuales gozó de mayor apoyo económico y logístico para su preparación como atletismo, mientras se adjudicó de medallas en boxeo y judo.
Brasil tiene como meta figurar entre los 10 mejores en el medallero en Río y para esto podría fijarse en Gran Bretaña como ejemplo de aprovechar su estatus de anfitrión para lograr el máximo desempeño de un país latinoamericano cuando los Juegos se realicen en Sudamérica por primera vez.
Cuba sufrió un miércoles negro en la segunda semana con la lesión de Robles y la decepción de subcampeón mundial de salto con pértiga Lázaro Borges, que no pasó la ronda eliminatoria luego de que se le quebrara la garrocha.
Sin embargo, la isla tuvo terminó con su equipo como el mejor ubicado de los países latinoamericanos con el décimo quinto lugar tras obtener 14 medallas, 10 menos que en Pekín pero con cinco de oro.
La nota importante para el deporte cubano fue que sus boxeadores ganaron dos medallas de oro, recuperando el éxito que fue el motor de su historia olímpica tras una página negra en la capital china hace cuatro años.
MEJORIA COLOMBIANA
Colombia, que había obtenido sólo dos medallas en Pekín, fue el tercer mejor país de la región con ocho preseas, incluyendo la dorada que se adjudicó Mariana Pajón en BMX y las de plata de Catherine Ibargüen en triple salto y Rigoberto Urán en ciclismo en ruta.
México se ubicó en el lugar 38, uno detrás de Colombia, gracias principalmente a sus clavadistas y arqueras antes de negarle Brasil la medalla de oro en fútbol que tanto ansiaba.
Argentina, que ganó seis medallas en Pekín, obtuvo apenas cuatro en la capital británica y una sola dorada con la victoria de Sebastián Crismanich en taekwondo, la primera en un deporte individual desde que Delfo Cabrera ganara el maratón en los anteriores Juegos de Londres, en 1948.
República Dominicana repitió su cosecha de dos medallas, Venezuela obtuvo su primer oro en 44 años por intermedio del esgrimista Rubén Limardo, mientras que el guatemalteco Erick Barrondo una de plata en la marcha de 20 kilómetros.