Durante una visita al Hospital Central Universitario Antonio María Pineda, fue posible conocer del jefe del Servicio de Emergencias, Dr. Ruy Medina Morales, que la dotación de insumos en esta ala del hospital no presenta escasez y que la operación de la sala se realiza con normalidad.
“Este período vacacional ha brindado tranquilidad, lo que se traduce en menos casos. Sin embargo, las patologías siguen siendo las mismas que en el resto del año: muchos accidentes vasculares cerebrales, casos de diábetes, litiasis vesicular y pancreatitis, así como numerosos accidentes los fines de semana, principalmente por ingesta alcohólica”, aclaró.
Acotó, asimismo, que las incidencias de emergencias, incluso en esta época del año, mantienen fluctuaciones similares a las de los demás meses, definidas en gran medida por conductas humanas que pueden ser corregidas.
“Hace poco atendimos a tres personas que iban en una misma motocicleta en estado de ebriedad. Esa es una clara tendencia suicida. El caso resultó en dos muertes y un herido dentro de la sala de emergencias. Es esencial hacerle un llamado a los motorizados y conductores en general. La gente se está matando como si no bastara con los altos índices de violencia”, relató el jefe de Emergencias.
Medina reiteró que hay suficientes recursos y que los equipos de cirugía general, traumatología, neurocirugía, otorrinolaringología, oftalmología y cirugía plástica operan regularmente, al igual que los equipos de emergencia general.
“Están de servicio un promedio de 30 a 35 médicos diariamente, quienes hacen vida en la sección de emergencias del hospital”, destacó el galeno.
Sobre la vinculación de temas políticos con el hospital, el galeno comentó que más que política, se trata de los gobiernos nacionales que, desde 1965, nunca han incrementado proporcionalmente los recursos requeridos.
“Los recursos designados nunca crecen al mismo ritmo que la inflación, por lo que deben ser administrados como si fueran el 100% de lo que alcanzaba para cubrir necesidades hace 40 años, pero a los precios actuales. Y aun así, lo seguimos logrando”, dijo el profesional del sector salud con 47 años de experiencia.
Informó, además, que en julio tenía que entregarse el presupuesto hospitalario, el cual debía ser de Bs. 80 millardos anuales para el HCAMP, “aunque el hospital quizás sólo recibe Bs. 10 millardos”.
Por último, recordó que cada área del HCAMP tiene su propio presupuesto, y luego todos se consolidan en un lote que se distribuye de manera equilibrada y acorde a las necesidades que vayan surgiendo.
Foto: Simón Orellana