El uso prolongado de anticonceptivos orales (AO) estaría asociado con una reducción del crecimiento endometrial durante la estimulación con estradiol, lo que reduciría las posibilidades de éxito de una transferencia de embriones congelados o fertilización in vitro (FIV), según un estudio.
«Existe un efecto adverso subestimado del uso prologado de los AO combinados (tejido endometrial delgado que no responde al estrógeno) que observamos por primera vez hace 10 años», dijo el doctor Robert F. Casper, del Centro de Tecnología Reproductiva Avanzada de Toronto.
«Esto dificultaría la concepción, aunque se trata de un efecto secundario probablemente poco frecuente y que sólo detectamos en la derivación a nuestro centro de atención terciaria», agregó.
El equipo de Casper evaluó la duración del uso combinado de AO y sus efectos en el crecimiento y el grosor del endometrio, según una revisión de las historias clínicas de 137 mujeres infértiles preparadas con estrógeno para la transferencia de un embrión congelado.
Todas habían suspendido los AO por lo menos dos años antes.
En la revista Obstetrics & Gynecology, el equipo escribe que el 21,9 por ciento de las participantes tenía un grosor endometrial desfavorable (menos de 7 mm; promedio 6,06 mm) el día 10 del ciclo para la transferencia embrionaria. Las 107 restantes tenían un grosor favorable (unos 10,03 mm).
Las mujeres con un grosor endometrial desfavorable habían utilizado los AO combinados durante 9,8 años, mientras que aquellas con un grosor endometrial de por lo menos 7 mm lo habían hecho durante 5,8 años.
Las participantes que habían tomado los AO durante menos de 10 años eran 4,43 veces más propensas a tener un grosor endometrial óptimo, comparadas con las que lo habían hecho durante 10 años o más.
Apenas cuatro días más de estimulación con estrógeno en el grupo con menos de 7 mm de grosor endometrial aumentó significativamente la tasa de cancelación de ciclo con respecto del grupo con un grosor endometrial de 7 mm o más (un 23 versus un 4 por ciento).
La tasa de embarazo fue más alta en el grupo con 7 mm o más de grosor endometrial que en el otro grupo (un 27 versus un 13 por ciento).
Prolongar el tratamiento con estrógeno permitiría que las mujeres con el endometrio delgado toleren la transferencia de embriones congelados durante mucho más tiempo en el ciclo.
«Pudimos tratar con éxito alguno de esos casos con el factor de estimulación de colonias de granulocitos (G-CSF, por su nombre en inglés)», dijo Casper.
Para los autores, «estos resultados son importantes para orientar a las mujeres que quieran optar por el uso prolongado de AO».
El uso prolongado de anticonceptivos orales (AO) estaría asociado con una reducción del crecimiento endometrial durante la estimulación con estradiol, lo que reduciría las posibilidades de éxito de una transferencia de embriones congelados o fertilización in vitro (FIV), según un estudio.
«Existe un efecto adverso subestimado del uso prologado de los AO combinados (tejido endometrial delgado que no responde al estrógeno) que observamos por primera vez hace 10 años», dijo el doctor Robert F. Casper, del Centro de Tecnología Reproductiva Avanzada de Toronto.
«Esto dificultaría la concepción, aunque se trata de un efecto secundario probablemente poco frecuente y que sólo detectamos en la derivación a nuestro centro de atención terciaria», agregó.
El equipo de Casper evaluó la duración del uso combinado de AO y sus efectos en el crecimiento y el grosor del endometrio, según una revisión de las historias clínicas de 137 mujeres infértiles preparadas con estrógeno para la transferencia de un embrión congelado.
Todas habían suspendido los AO por lo menos dos años antes.
En la revista Obstetrics & Gynecology, el equipo escribe que el 21,9 por ciento de las participantes tenía un grosor endometrial desfavorable (menos de 7 mm; promedio 6,06 mm) el día 10 del ciclo para la transferencia embrionaria. Las 107 restantes tenían un grosor favorable (unos 10,03 mm).
Las mujeres con un grosor endometrial desfavorable habían utilizado los AO combinados durante 9,8 años, mientras que aquellas con un grosor endometrial de por lo menos 7 mm lo habían hecho durante 5,8 años.
Las participantes que habían tomado los AO durante menos de 10 años eran 4,43 veces más propensas a tener un grosor endometrial óptimo, comparadas con las que lo habían hecho durante 10 años o más.
Apenas cuatro días más de estimulación con estrógeno en el grupo con menos de 7 mm de grosor endometrial aumentó significativamente la tasa de cancelación de ciclo con respecto del grupo con un grosor endometrial de 7 mm o más (un 23 versus un 4 por ciento).
La tasa de embarazo fue más alta en el grupo con 7 mm o más de grosor endometrial que en el otro grupo (un 27 versus un 13 por ciento).
Prolongar el tratamiento con estrógeno permitiría que las mujeres con el endometrio delgado toleren la transferencia de embriones congelados durante mucho más tiempo en el ciclo.
«Pudimos tratar con éxito alguno de esos casos con el factor de estimulación de colonias de granulocitos (G-CSF, por su nombre en inglés)», dijo Casper.
Para los autores, «estos resultados son importantes para orientar a las mujeres que quieran optar por el uso prolongado de AO».