El dr. Jean Lorenceau, de la Universidad Pierre y Marie Curie de París, ha desarrollado un dispositivo mediante el cual los movimientos de nuestros ojos pueden ser usados como un modo de escritura.
Este aparato no fue desarrollado anteriormente debido a una causa simple: falta de tecnología. El ojo humano produce muchos movimientos involuntarios, y estos al ser interpretados por el dispositivo se convertían en cualquier cosa menos en la escritura deseada. Mediante algunos nuevos avances, el dr. Lorenceau ha podido usar una ilusión óptica llamada “reverse-phi motion” que fue muy estudiada el año pasado. Finalmente, con la incorporación de esta ilusión al sistema, fue posible hacer un seguimiento de los movimientos voluntarios del ojo humano.
Lorenceau dice que con prácticas de 90 minutos, una persona puede usar el sistema para escribir unos 20 caracteres por minuto. Sí, no es una gran velocidad, pero para muchas personas con distintos tipos de discapacidad, es una nueva forma de expresarse. Además de letras, también se puede usar el sistema para escribir números y hacer dibujos.