Los venezolanos Jesús Villafañe e Igor Hernández encaran con optimismo su participación en el torneo de vóley-playa de los Juegos Olímpicos, que se disputa a partir del sábado en la ‘arena’ de Trafalgar Square, escenario improvisado en pleno centro de la ‘City’.
Los sudamericanos llegaron a Londres con la aureola de haber vencido al dúo estadounidense de Todd Rogers y Phil Dalhausser, defensores del oro, en Berlín en el marco de la gira mundial.
«Fue un privilegio derrotar a los campeones olímpicos (…) La clave de nuestra victoria fue la concentración. Jugamos de manera muy rápida debido a que a causa de la altura de Dalhausser no queríamos darle tiempo a bloquear. Todo salió bien y casi no cometimos errores», explicó Villafañe.
Respecto a sus metas en la cita londinense, el jugador señaló las ‘semis’ como algo probable. «Nuestro objetivo es llegar a las semifinales. No creo que esto sea imposible», añadió.
Por su parte, Hernández, quien a pesar de jugar al voleibol tradicional desde los 8 años, recién debutó en el de playa a los 19, por falta de un lugar donde practicarlo, explicó que obtiene parte de sus fondos trabajando como entrenador.
Preguntado sobre los favoritos al título, subrayó: «nosotros, por supuesto. Y creo que Estados Unidos, Brasil, Alemania y Holanda».
