Caos. La comunidad El Roble, del municipio Palavecino, está invadido de huecos. La avenida principal y transversales, necesitan de un pronto mantenimiento, de lo contrario, la desdicha será la misma para quienes habitan en la zona.
Carmen Álvarez, vecina, declaró que desde hace muchos años no ocurre una rehabilitación vial. Expuso los peligros que corren tanto conductores de vehículos particulares como de unidades del transporte público, cada vez que caen en los cráteres, incluso, evitándolos.
Los vecinos, a través de los consejos comunales, han solicitado la atención de la Alcaldía, sin embargo, tardan en prestar la ayuda. Haría falta mejorar la capa asfáltica y también las aceras, por cuanto presentan serias imperfecciones.
“Aquí no ha llegado el plan de bacheo, al contrario, aumentan los huecos. Las calles están destrozadas, de principio a fin, a causa de la falta de mantenimiento. Nos preocupa cómo desmejoran las vías de la comunidad y no recibimos atenciones de la municipalidad”.
Falta de iluminación
Por otra parte, mencionan las fallas en el alumbrado público. Cuando cae la noche, es difícil la visibilidad en El Roble, desde que empezaron a sufrir desperfectos las luminarias. Mientras que en algunos tramos ni siquiera existen lámparas.
Los habitantes esperan que mediante el Consejo Federal de Gobierno, lleguen los recursos económicos para el pavimento nuevo y el arreglo de dichas luminarias. Se trata de una necesidad que continúa sin solventarse, pese a los frecuentes llamados hechos a Corpoelec.
Ninguna vía de comunicación ha dado resultados para conseguir la atención de la empresa de electricidad. Cartas, correos electrónicos, llamadas, visitas a las oficinas, no dieron buenos resultados, al menos, no por ahora.
“Sentimos miedo, cuando apenas se hace de noche, porque las calles quedan a oscuras. Desde siempre, las luminarias han presentado deficiencias, en este sentido, se necesita una labor exhaustiva”.
Fotos: Jairo Nieto
