El cantautor panameño Rubén Blades acompañado del joven maestro venezolano Gustavo Dudamel presentó el domingo su obra «Maestra Vida», un drama musical salsero, en un concierto deslumbrante que reunió en Caracas a más de 140 músicos y voces ante más de 200.000 personas.
«Es para mí un orgullo y privilegio realizar este concierto junto al maestro Dudamel y está gente desbordante talento. Estoy viviendo un sueño», dijo Blades a la prensa durante un ensayo.
El músico y actor panameño, de 64 años, uno de los más representativos cantautores de poesía urbana, recordó que «cuando hicimos Maestra Vida», un álbum doble grabado en estudio en 1980 bajo la producción del puertorriqueño Willie Colón, «tenía yo 32 años, estaban muy frescos los éxitos de ‘Metiendo Mano’ y ‘Siembra’ (sus dos primeros larga duración con el afamado músico boricua)… nunca pensé en repetirlo tantos años después. Estoy muy agradecido».
Resaltó que «es la segunda vez que se hace (en público). La primera vez fue hace 30 años en Puerto Rico», pero en dimensiones más modestas, «así que para mi verlo aquí con más de 140 músicos, estar acompañado de un gigante de la música clásica como es el maestro Dudamel ante cientos de miles de personas, es algo extraordinario que recibo como un regalo de los venezolanos».
En la nueva presentación de su opera-salsera tuvo un lugar de privilegio la potente musicalidad imprimidad por Dudamel y la Orquesta Sinfónica Simón Bolívar, además de una depurada prosa. Se prescindió en está ocasión de los sónidos urbanos y de las palabras soeces, el lenguaje prepotente de los personajes varones de la respecto de las mujeres y la homosexualidad que signaron la obra original y que provocó en su momento la difusión de los temas fuesen prohibidos en muchos países de la región.
«Maestra Vida» es sin duda el proyecto más ambicioso de la obra musical de Blades y quizás uno de los álbumes menos comerciales del género. En ella a manera de una opera con ritmos caribeños como la salsa, el bolero y la plena se presenta la saga en tres generaciones de una modesta familia panameña, donde con un criterio político se abordan temáticas que afectan la vida diaria del latinoamericano: la pobreza, la muerte, la euforia de la juventud y la llegada de la vejez con su equipaje dramático de sueños que se arrugaron junto a la piel.
Como la mayoría, uno de sus personajes, pasa «por días de sol, luz y de aguaceros, paso por noches de tinieblas y de lunas, paso afirmando, paso negando, paso con dudas entre risas y amarguras buscando el por qué y el cuándo».
«Maestra Vida’ es una obra única, que sigue vigente. Son historias cotidianas y lo más importante es que es una historia con la que la gente se puede sentir identificada», dijo Dudamel a la prensa.
Dudamel, director de la Orquesta Filarmónica de Los Angeles, no sólo creció escuchando a Mozart, Mahler y tantos otros compositores clásicos; sus primeros contactos con la música incluyeron escuchar en su hogar «salsa brava».
«Yo llevo la salsa en las venas al igual que mi padre», manifestó a la AP. Su padre Oscar Dudamel se enamoró del trombón a los 10 años al ver en televisión a Willie Colón interpretando «La Murga de Panamá» y desde entonces no pierde oportunidad de tocar en público los temas que hicieron famosa la dupla de Colon y el cantante Héctor Lavoe.
«Esta obra la estamos haciendo en una dimensión totalmente distinta a lo que es la salsa, pero no es extraño para ninguno de nosotros. La música es una sola y es universal, eso es más evidente en Venezuela, por lo tanto los intérpretes de una orquesta clásica también tienen la capacidad de ejecutar un género como la salsa, es algo que se siente», agregó.
En «Maestra Vida» convergen atrevidamente cantantes y un total de 140 músicos integrantes de la Sinfónica Juvenil Simón Bolívar y la Orquesta Latino Caribeña, bajo la batuta de Dudamel, el más famoso egresado del programa educativo conocido como «El Sistema» en el que se enseña música a niños de bajos recursos en Venezuela.
La narración estuvo a cargo del afamado salsero, quien presentó cada uno de los distintos actos de que se compone su melodrama salsero.
Pese al paso de los años «Maestra Vida» sigue causando asombro. En su momento fue un fracaso comercial, particularmente al compararse con otras producciones y en particular con el álbum «Siembra», el segundo realizado en conjunto por Blades y Colón en 1978, que redefinieron el género y por lejos es la producción salsera más vendida de la historia.
Sus temas con el pasar de los años adquirieron el carácter de clásicos y son constantemente descubiertos por las nuevas generaciones.
El memorable concierto de Blades junto Dudamel fue precedido por el cantautor venezolano Franco De Vita, quien emocionó al público con cada canción, y encendió los motores de una apoteósica velada.
El ganador de dos Grammy, cantante y compositor de éxitos como «Tú de qué vas» y «Cálido y frío», cerró en Caracas su gira «Mira más allá 2012», que comenzó el pasado 9 de febrero pasado.