El incendio declarado el domingo en la frontera entre España y Francia “no ha progresado, pero no está bajo control”, dijo el lunes el ministro de Interior catalán, Felip Puig, mientras los bomberos combaten el siniestro con apoyo de hidroaviones franceses y españoles.
El cuerpo de los Agentes rurales calculó que “el perímetro del incendio es, aproximadamente, de 63 kms y que habría afectado una superficie de unas 13.000 hectáreas de 17 municipios”, en un comunicado difundido por los bomberos de la Generalitat.
Al ser preguntado sobre los posibles causas de los incendios en La Junquera y en Port Bou declarados la víspera, Puig lo atribuyó a “una colilla o a un pequeño artefacto” que prendió fuego, si bien puntualizó que “probablemente los dos incendios se deben a imprudencias o negligencias”.
El ministro catalán dijo que los efectivos luchaban para tratar “de evitar que el fuego salte a zonas más frondosas” vecinas como la comarca de la Alta Garrotxa.
“Hasta el momento, se han producido cuatro muertes, la última corresponde a un hombre de 64 años de nacionalidad francesa que se encontraba ingresado en estado muy crítico en el Hospital del Vall d’Hebron” de Barcelona, informó un comunicado de la consellería (ministerio) de Sanidad.
Otros tres franceses resultaron muertos el domingo, un padre y su hija de 15 años que intentaban huir de las llamas saltando al mar en Port Bou, y un hombre de 75 años que padeció una crisis cardíaca cuando vio la amenaza de las llamas en su vivienda.
El Sistema d’Emergències Mèdiques (SEM) practicó 47 asistencias sanitarias, de las cuales, 23 fueron trasladados a diferentes centros sanitarios, informó el comunicado.
“Actualmente siguen ingresados 8 pacientes, 4 de los cuales se encuentra en el hospital barcelonés del Vall d’Hebron y 4 en el Hospital Trueta de Girona”, precisó.