En la noche de la presentación a la prensa del Miss Venezuela, se cuidaron celosamente los detalles de la transmisión en vivo para que los televidentes disfrutaran de un evento impecable.
Pero quienes estuvieron frente al televisor y quienes se han enterado de la imposición de bandas a través de los diferentes medios de comunicación, se preguntarán qué hay detrás de una presentación como esta.
EL IMPULSO estuvo desde el viernes en Venevisión, por lo que hoy podemos brindarles mayor información sobre lo sucedido.
Las verdades de la prensa
Las preguntas formuladas por los 24 periodistas invitados, se grabaron el día viernes desde las tres de la tarde en el estudio seis del canal de La Colina.
La única que no asistió a la grabación fue Erika De La Vega, quien formuló su pregunta directo desde el estudio de Erika Tipo 11, su programa de televisión transmitido por Venevisión Plus.
Mucho se especuló sobre una supuesta censura en las preguntas realizadas por los medios de comunicación. Sin embargo, cada periodista tuvo la oportunidad de escribir sus propias interrogantes, evaluadas con anticipación por el equipo de Venevisión para evitar que se repitieran.
Es falso que hayan prohibido preguntas sobre sexualidad, cuando la participación de uno de los comunicadores sociales estuvo basada en comentarios sobre la inclusión de participantes transexuales en concursos de belleza.
En el estudio uno
El sábado a las seis de la tarde ya estaba listo el estudio uno de Venevisión, para iniciar la transmisión una hora más tarde.
Un gran equipo técnico y humano aceleraba la marcha mientras Joaquín Riviera supervisaba que todo saliera como se había planeado.
Al evento sólo tuvieron acceso dos invitados por cada participante, debido al reducido espacio.
En cada corte comercial, los reporteros gráficos tenían la oportunidad de fotografiar a las candidatas en grupos de seis, tal y como aparecieron en televisión durante la ronda de preguntas.
Detrás de cámaras se encontraba parte del equipo de preparadores del Miss Venezuela, apoyando entre gestos a las candidatas. El profesor de oratoria José Rafael Briceño y el entrenador físico Richard Linares, no se perdieron ni un segundo de la presentación.
Entre reinas
Algunos pronósticos de los expertos en concursos de belleza cayeron este año, en relación a la asignación de bandas. Se esperaba que Miluany Hull recibiera la banda de Amazonas y se le otorgó la de Cojedes; lo mismo sucedió con Claudia Baratta, a quien le apostaban la representación de Distrito Capital y terminó siendo Miss Mérida.
Es de resaltar que Baratta y Oriana Lucchese (Miss Miranda y la principal favorita), son dos modelos venezolanas radicadas en México y Londres, respectivamente, y que regresaron al país para ingresar a las filas del concurso.
Como dato curioso, este año no hay representante de Delta Amacuro. Esta banda fue sustituida por Península Guajira, que se le entregó a Rociree Silva, quien pertenece a la etnia wayúu.
Fanny Moreno, Miss Vargas, es la mayor de las candidatas. La participante tiene 25 años, edad máxima permitida por el concurso.
Aunque las candidatas se vieron muy elegantes con las bragas confeccionadas por Douglas Tapia, la animadora Carolina Indriago no corrió con la misma suerte. Su vestido, confeccionado por Alejandro Fajardo no le favorecía.
Fotos: Oswaldo Azuaje
