En la calle 1 con la avenida Moyetones, de la Zona Industrial III, existe un bote de aguas blancas que mantiene arruinado el asfalto. Un vehículo de carga pesada, cayó en un enorme cráter de ese tramo, interrumpiendo la jornada laboral del conductor y, exponiendo al mismo riesgo, al resto de los chóferes.
Al parecer, ya fue notificado a Hidrolara el caso de la tubería rota, sin embargo, el vital líquido sigue malgastándose y el servicio comienza a fallar en los sectores vecinos, como ocurre en Las Tinajitas. Desde hace cuatro días, está el desperfecto en las conexiones.
Mileidy Artig as, vecina, declaró que los daños en la vialidad datan de hace muchos años y, con respecto al bote de aguas, haría falta sustituir por completo las tuberías de la zona porque desde hace 40 años estarían utilizando las mismas.
“Los tubos están muy viejos y, por esa razón, ocurren constantemente los botes de agua. Los huecos se han vuelto más grandes con la humedad del suelo y, cuando se atascó el camión, varios de los vecinos debieron colaborar para tratar de sacarlo”, sostuvo.
Aunado a la falta de rehabilitación vial y de las quejas dirigidas a la hidrológica, está la inseguridad que afecta tanto a empleados y empresarios, como a los habitantes de barriadas circunvecinas.
Muy temprano, cuando apenas inicia la jornada de trabajo y también al caer la tarde, los delincuentes se llevan todo a su paso. En motos o caminando, los amigos de lo ajeno, sorprenden a las personas para despojarlas de teléfonos celulares, dinero en efectivo, joyas u otros objetos de valor.
En este sentido, exhortan al Cuerpo de Policía de Lara y a la Guardia Nacional a objeto de que realicen operativos permanentes en la zona, en especial, cuando sea la hora de entrada y salida de los trabajadores de la Zona Industrial III. Mientras que en las comunidades solicitan puntos de control o alcabalas, capaces de instalar el orden entre los ha bitantes, poniéndolos a salvo de los atracos, robos y demás hechos delictivos.
Fotos: Jairo Nieto