“Llamamos la atención del Ministerio del Ambiente en el sentido de que este no es un problema de tinte político sino originado por no haber cumplido con la responsabilidad de darle el mantenimiento apropiado a esta estructura”.
Lo dijo el diputado Hiram Gaviria, presidente de la Comisión de Ambiente, Recursos Naturales y Cambios Climáticos de la Asamblea Nacional, quien estuvo este viernes en la represa Cuatricentenaria o de Atarigua con la finalidad de conocer in situ la problemática que la misma está confrontando y que ha dejado sin agua a los habitantes de Carora.
Estuvo acompañado por sus colegas de Lara, Guillermo Palacios, Edgar Zambrano y Eduardo Gómez Sigala y del CLEL, Lorenzo Monasterios, además de funcionarios de Hidrolara, concejales, dirigentes políticos y representantes de comunidades del municipio Torres.
Llamó la atención de los visitantes el estado en que se encuentra el sistema, a pesar de que últimamente se han llevado a cabo algunos trabajos de limpieza, sobre todo en la vía que comunica al tapón del reservorio de agua.
Jesús Guillermo Gómez, candidato de la MUD a la alcaldía, expuso la situación que han venido confrontando los caroreños desde hace unos cuantos días y expresó el temor generalizado de que en cualquier momento vuelva a presentarse la falla pues lo único que han hecho es colocar “pañitos calientes” al problema técnico planteado.
“Hasta ahora no tenemos ninguna información sobre lo que se ha hecho o se va a hacer y tememosque en unos dos o tres meses Carora vuelva a quedarse sin agua”, expresó.
Igualmente se refirió al sistema Los Quediches, que también presenta problemas por la existencia de numerosas filtraciones y tomas clandestinas a todo lo largo de la tubería.
Anderson Sandoval, presidente del Centro de Estudiantes de la UCLA, núcleo Carora, habló luego y dijo que durante el presente año Atarigua ha presentado cuatro averías y el Ministerio del Ambiente no ha hecho nada para resolver definitivamente la situación, además de que a ellos, por reclamar, los han perseguido y detenidos.
“No es justo que por alzar nuestras voces hayamos sigo perseguidos por el CICPC sin ser delincuentes, pero no por eso vamos a dejar la lucha por el pueblo”, afirmó.
Con relación a afirmaciones del sector oficial de que sus manifestaciones son financiadas por el gobernador, aclaró que, “a nosotros no nos paga nadie porque la lucha estudiantil no tiene precio”.
La concejal Ada Camacaro también expuso ante los diputados la situación y denunció que el Ministerio del Ambiente está colocando equipos viejos en la presa de Atarigua, además de que Carora depende de ellos para recibir agua, pero si hay una falla eléctrica, algo común en Torres, la ciudad vuelve a quedarse sin el vital líquido.
El ingeniero Martín Balza, de Hidrolara, dijo que el Ministerio del Ambiente sólo ha hecho reparaciones a medias, en febrero, abril y junio y que como existe un problema de desinformación, la empresa hidrológica local ha tenido que asumir la responsabilidad ante la colectividad. Con respecto al sifón colocado en la presa, que envía 360 litros por segundo, es un sistema muy vulnerable, sobre todo por las constantes fallas eléctricas, que al ocurrir descompensa la tubería.
También informó que en el sistema Los Quediches han sido detectadas 21 filtraciones, además de numerosas tomas clandestinas.
Domingo Montes de Oca y Jorge Alaim Álvarez, prefecto de Torres y jefe civil de la parroquia Espinoza de los Monteros, respectivamente, también intervinieron calificando de crítica las situación, no sólo para Carora sino también para otras poblaciones, entre ellas Quebrada Arriba, amenazada por la presa El Ermitaño.
Luego de escucharlos, el diputado Gaviria habló en el lugar y anunció que plantearán el caso en la plenaria de la Asamblea Nacional y gestionarán los recursos necesarios para acometer con eficiencia y transparencia las obras que sean necesarias para que, en mediano y largo plazo, garantizar el funcionamiento del sistema.
“Esto necesita obras de envergadura de forma tal que el mantenimiento y la limpieza que no se hizo para eliminar el sedimento y mantener en buen estado el aliviadero, se haga adecuadamente, y que la comunidad sepa cuales son las empresas que se contraten, qué experiencia tienen en el área nacional e internacional, qué equipos y materiales se están utilizando, porque aquí no se trata de ponerle pañitos calientes para que dentro de tres o seis meses, con la entrada de las lluvias, esto pueda colapsar y sufrir daños superiores”. afirmó.
Dijo que no le corresponde al Poder Legislativo implementar soluciones, pero se comprometió ante la colectividad del municipio Torres y del estado Lara a seguir tratando el problema en el parlamento nacional y gestionar los recursos necesarios.
“Esta es una solución que amerita el concurso de todos. Por supuesto, hay una responsabilidad pues las represas están en el ámbbito del Poder Ejecutivo a través del Ministerio del Ambiente”, señaló.
Gaviria también dijo que en este caso la distribución del agua potable es una responsabilidad de Hidrolara, “pero aquí tiene que haber una actuación concertada. No podemos decir, hasta aquí es mi responsabilidad y desde aquí es la tuya y nosotros como parlamentarios tenemos como tarea buscar la armonía entre los poderes públicos nacionales y regionales.
Hizo un llamado a quienes dirigen en la región el Ministerio del Ambiente, Hidrolara, la alcaldía y la gobernación del estado para quetrabajen de manera mancomunada para solucionar los problemas que se han presentado con el suministro de agua a Carora.
“Sería una irresponsasbilidad por parte nuestra o de cualquier funcionario público simplemente limitarse a endozarle la responsabilidad a otro poder público”, puntualizó.
Reiteró su disposición a trabajar para que, hasta donde sea posible, haya armonía entre los poderes públicos nacionales y regionales de forma tal que los problemas se solucionen, además de canalizar ante el Ministerio del Ambiente los recursos necesarios. Igualmente hizo un llamado a la colectividad del municipio Torres a mantenerse alerta porque “sin la presión social, aún cuando el ministerio diga que no hay problema, que todo es un invento, que estamos en campaña electoral, nosotros estamos en la obligación de seguir actuando”.
Nuevamente insistió en que la causa fundamental de lo que está pasando con la represa Cuatricentenaria, igual que con Los Quediches y El Ermitaño, es la falta de mantenimiento, responsabilidad que compete fundamentalmente al Ejecutivo nacional a través del Ministerio del Ambiente, “pero la solución nos compete a todos”.
Igualmente dijo que se mantendrán vigilantes sobre las empresas a ser contratadas porque en el caso actual de Lara hay dudas sobre las encargada de adelantar los trabajos o reparaciones al sistema y el parlamento está en la obligación de todo cuanto ocurre en las represas de Lara. Del embalse, Gaviria y sus acompañantes se trasladaron al núcleo de la Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado en la avenida Lara de Carora donde sostuvieron una reunión con un grupo de estudiantes.
Nuevamente los dirigentes expusieron su posición en torno al problema suscitado y denunciaron los atropellos de que han sido víctimas por denunciar las fallas en el suministro de agua. Igualmente expusieron sus problemáticas algunos dirigentes comunales, entre ellos los de Quebrada Arriba, amenazados por la presa El Ermitaño.
Allí, el diputado local Lorenzo Monasterios dijo que “en el municipio Torres hay mucha agua, pero falta gobierno”.
Quebrada Arriba sigue en peligro
Una comisión de habitantes de la capital de la parroquia El Blanco también aprovechó para plantear al diputado Hiram Gaviria y sus acompañantes la situación de emergencia que están viviendo por el temor de una fractura de la presa El Ermitaño.
Carlos Vásquez, Carmen Pérez, Yorvis Montes, Bernardo Álvarez y Belkis Álvarez informaron que siguen esperando de Hidrolara la entrega de una tubería para construir otro desagüe similar al que colocaron hace un mes, aproximadamente.
Igualmente dijeron que los técnicos, entre ellos los buzos contratados por el Ministerio del Ambiente, no están haciendo nada después de haber fracasado en su intento de abrir el aliviadero obstruido por los sedimentos.
Vásquez explicó que necesitarían al menos otros cinco sifones como el ya existente para aliviar en parte el agua de la presa, aunque al llegar las lluvias la situación será diferente y ese el temor de la población.
Fotos: Jairo Nieto