Pablo Sandoval tuvo la última palabra en cuanto al debate sobre si merecía o no ser el titular de la tercera base por la Liga Nacional en el Juego de Estrellas.
El venezolano bateó el primer triple con bases llenas en la historia del clásico de mitad de temporada, el gran hit de una primera entrada de cinco carreras con la que el equipo de la Liga Nacional se encaminó el martes a una victoria 8-0 sobre la Liga Americana.
Fue la manera enfática de silenciar a las voces que cuestionaron la selección del «Kung Fu Panda» como titular en el juego, en la que gracias a una votación en masa de los fanáticos de sus Gigantes de Francisco le permitió remontar un margen en contra en los últimos cuatro días para superar a David Wright de los Mets de Nueva York.
Wright tenía mejores números ofensivos frente a Sandoval, que se perdió un mes de actividad al fracturarse la mano.
«Vine a divertirme, no le presté atención a las cosas que se dijeron. Esa no fue mi decisión», declaró Sandoval. «Hice mi trabajo y se demostró que los fanáticos tomaron la decisión correcta. Se dijeron muchas cosas, pero al final hablaron los fanáticos».
Sandoval fue uno de tres Gigantes que incidieron en el juego.
_Melky Cabrera se fue 3-2, con un jonrón de dos carreras.
_Matt Cain abrió el juego y cubrió dos entradas con un hit permitido para acreditarse la victoria.
_Buster Posey, el receptor, anotó una carrera tras negociar una base por bolas.
«Demostramos que los Gigantes de San Francisco tienen buenos peloteros y los fanáticos no se equivocaron en escogernos», dijo Sandoval.
Este fue el segundo Juego de Estrellas seguido para Sandoval, quien el año hizo su primera presentación tras ser llamado por el mánager de los Gigantes Bruce Bochy y respondió con un doble remolcador.
«El año pasado llegué como reserva y ahora fui parte del lineup abridor», resaltó.
«Es otro mérito de mi carrera, el sueño de todo pelotero que llega a Grandes Liga, el de todo niño al empezar jugando el beisbol. Quiero seguir creciendo».
El bate del triple que dio fue recolectado por el Salón de la Fama del béisbol para ser exhibido en Cooperstown.
La victoria de la Nacional asegura que el equipo del circuito podrá ser local en cuatro juegos de la próxima Serie Mundial, algo que favoreció a los Gigantes en su marcha al campeonato en 2010.
Con su equipo a medio juego de los líderes Dodgers de Los Angeles en la división Oeste, Sandoval espera repetir en 2012.
«Es una ventaja en jugar cuatro juegos en casa en la Serie Mundial. «Estoy contento, seguir aportando para mi equipo y seguir dando el todo para otra Serie Mundial..