El gobierno español anunció el miércoles nuevas medidas de austeridad, que incluyen aumentos en los impuestos a las ventas y recortes de gastos dirigidos a eliminar 65.000 millones de euros (79.850 millones de dólares) del presupuesto del estado en los próximos dos años y medio.
Un día después de conseguir que la Unión Europea aprobara un enorme paquete de rescate bancario, el presidente de gobierno Mariano Rajoy le advirtió al Parlamento que el futuro de España está en juego, en momentos en que el país lidia con una recesión, un abultado déficit y preocupaciones de los inversionistas por su deuda soberana.
«Estamos viviendo un momento crucial que determinará nuestro futuro, el de nuestras familias, el de nuestros jóvenes, el de nuestro bienestar y el de todas nuestras esperanzas», dijo Rajoy.
«Esta es la realidad, señorías. Tenemos que salir de este atolladero y necesitamos hacerlo cuanto antes. Y aquí no caben ni fantasías ni ocurrencias, porque no hay mucho para escoger», agregó.
Los recortes de gastos, diseñados para eliminar 65.000 millones de euros de los presupuestos del Estado para el 2015, incluyen un recorte salarial a los funcionarios públicos y miembros del Parlamento nacional y una nueva ola de cierres de empresas estatales. España también acelerará un aumento gradual de la edad de jubilación, de 65 a 67 años.
Las medidas se producen a cambio del rescate financiero de hasta 100.000 millones de euros para salvar a los bancos que concedieron a España los otros 16 países de la eurozona.
Los ministros de Finanzas aprobaron el programa de rescate está semana en reuniones en Bruselas y hasta 30.000 millones de euros podrían llegar a los bancos españoles para finales de este mes.
Los bancos del país están agobiados por miles de millones de euros en activos tóxicos luego del desplome del mercado inmobiliario español. El objetivo es fortalecer los estados financieros de los bancos frente a nuevas sacudidas económicas para que puedan empezar a prestar a empresas y familias. El monto total que España buscará no se conoce todavía.
Los ministros de Finanzas de Europa también extendieron esta semana el plazo límite para que España alcance un déficit presupuestario inferior al 3% de su producción económica anual, hasta el 2014. El tamaño de la economía española en el 2011 se calcula en 1,5 billones de dólares, la cuarta más grande de la eurozona.
Entre los incrementos de impuestos a la venta anunciados el miércoles está un aumento de tres puntos porcentuales en productos y servicios como ropa, automóviles, cigarrillos y servicio telefónico, a 21%, y uno de dos puntos sobre tarifas de transporte público, comidas procesadas y servicios en bares y hoteles, a 10%. El impuesto sobre productos básicos como pan, medicinas y libros sigue siendo de 4%.
Los incrementos eran esperados, pero van contra las promesas de campaña de Rajoy antes de ser electo en noviembre y desde que llegó al poder.
Otras medidas son:
_ 660 millones de euros en recortes en los gastos del gobierno, adicionales a las reducciones ya incluidas en el presupuesto del 2012.
_ recortes salariales para empleados públicos y parlamentarios.
_ más cierres de empresas estatales.
_ eliminación de deducciones tributarias para dueños de viviendas
_ un recorte de 30% en el número de concejales municipales.
_ cambios en las prestaciones a los desempleados, diseñados para alentar a los desempleados a buscar trabajo rápidamente.
_ un recorte de 20% en los subsidios gubernamentales a partidos políticos y sindicatos.