En septiembre serán aumentados los precios de los medicamentos, ante lo cual la población se encuentra en incertidumbre, porque a veces ni siquiera es el costo sino la escasez que les impide continuar los tratamientos recetados por los médicos.
Dario Conde Alcalá, director de relaciones institucionales de la Federación Farmacéutica Venezolana (Fefarven), aclaró que el artículo 2 de la Ley del Medicamento, señala que el Ejecutivo nacional es el responsable de adjudicar el precio de los fármacos, previo acuerdo con la industria del medicamento.
“Es una creencia falsa que los precios lo fija la farmacia, son los laboratorios previo acuerdo con el Ministerio de Salud y Economía, órgano adscrito al gobierno nacional”, explicó Conde Alcalá.
Precisó además, que las declaraciones sobre el próximo aumento no fueron claras, y ni siquiera existe hasta la fecha una resolución de cuáles fármacos serán afectados y cómo será el procedimiento.
“Según la información que manejaron, algunos medicamentos subirán de precios, pero otros bajarán, por eso debemos esperar”, acotó el farmaceuta.
Sin acceso para todos
Según Conde Alcalá, hay dos problemas principales que limitan el acceso a los medicamentos.
“Uno de ellos es que son muy caros; o más bien, el precio asignado (por el Ejecutivo nacional y los laboratorios) son demasiado altos, aunque el coste para producirlos sea de tan solo una fracción de ese precio”, declaró.
En segundo lugar, el desarrollo del medicamento está orientado a obtener el máximo beneficio económico, no social, lo cual sesga los esfuerzos dirigidos al desarrollo de medicamentos que son esenciales para el bienestar de la sociedad. “Como los pobres disponen de poco dinero para gastar, las compañías de medicamentos, bajo las disposiciones actuales, tienen muy pocos incentivos para realizar investigaciones sobre las enfermedades que padecen los pobres”, dijo el farmaceuta.
Ofensa ministerial
Conde Alcalá indicó que las palabras de la Ministra de Salud, Eugenia Sader sobre los establecimientos de Farmapatria son una ofensa.
“Dijo que en estos expendios se van a repartir de manera gratuita una serie de medicamentos por un encargado, sin embargo, nunca habló de la necesidad de la prescripción facultativa (receta médica), sobre todo para fármacos como euthirox y glucofage, entre otros”,
De no pedir los récipes, se estaría violando de forma flagrante la Ley del Ejercicio de la Medicina y Farmacia.
Por otra parte, indicó que debe existir un farmaceuta y un auxiliar de farmacia en estos establecimientos, con licencia especial para este tipo de trabajo.
Invertir en investigación
Cada año mueren millones de personas debido a enfermedades que se pueden prevenir y tratar, sobre todo en los países pobres.
En muchos casos se pueden producir a gran escala medicamentos baratos para salvar vidas, pero sus precios de venta impiden que los compren las personas que los necesitan, como estimó Darío Conde Alcalá.
De hecho, hay muchos que mueren porque no hay curas o vacunas debido a que se dedican muy pocos recursos y talento de investigación a tratar las enfermedades de los sectores pobres.
“Esta situación representa un fracaso de nuestra legislación actual, la cual debe corregirse urgentemente: mientras que en lo internacional encabezados por la Organización Mundial de la Salud que empezarían a modificar el régimen ineficaz de propiedad intelectual que obstaculiza el desarrollo y disponibilidad de medicamentos asequibles a todas las capas sociales”, aseveró Conde Alcalá.
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