Profesores, estudiantes trabajadores administrativos y obreros de distintas casas de estudio del país, se concentraron la mañana de este martes en la plaza del Rectorado de la Universidad Central de Venezuela, desde donde marcharon hasta la Asamblea Nacional para exigir un presupuesto justo, el pago de pasivos laborales y mejor calidad de los servicios.
Cabe destacar que por primera vez en muchos años se evidenció la unión de toda la comunidad universitaria, por un fin común, lo que dio mucho más contundencia a la movilización.
En este sentido, la presidenta de la Federación de Asociaciones de Profesores Universitarios de Venezuela (FAPUV), Lourdez Ramírez de Viloria, resaltó que la comunidad universitaria por fin entendió que la unidad es la estrategia fundamental para conseguir que el gobierno nacional cancele todas las deudas y aumente el presupuesto.
“Las universidades están siendo golpeadas por el gobierno con un cerco presupuestario y además debemos denunciar de manera muy responsable que ha habido violencia contra la planta física e intervención judicial que ha impedido la elección de autoridades y no podemos seguir permitiendo que esto siga sucediendo”, sentenció.
Indicó que en las universidades se ha propiciado un clima de intervención que se pudiese concretar en cualquier momento, por lo tanto aseguró que estarán vigilantes para defender la autonomía universitaria.
Asimismo expresó que las providencias estudiantiles de bibliotecas, comedores y transporte se encuentran afectadas, por el “estrangulamiento” gubernamental, que al parecer quiere acabar con las universidades del país.
Aseguró que las casas de estudio han llegado a un acuerdo para realizar actividades de protesta y no parar las clases, pero que es posible que se tenga que llegar a una “Hora 0”.
En defensa de la Academia
Por otra parte, una nutrida representación de la Universidad Centro Occidental, Lisandro Alavarado, dijo presente en la manifestación realizada en Caracas en apoyo a la educación superior.
La presidenta de la Asociación de Profesores de la UCLA, Deborah Velasquez de Valecillos, afirmó que participaron en la movilización para defender a la academia y los intereses de todos los trabajadores universitarios.
“El signo que se activó para esta movilización es el signo de la sumatoria, estudiantes, docentes, obreros y administrativos unidos en una sola voz, demandando lo que se exige para la universidad como tal, para poder garantizar una formación con calidad, que la universidad cumpla con los tres pilares fundamentales como es la docencia, la investigación y la extensión”, explicó.
Afirmó que todo el personal que trabaja en las casas de estudio necesitan percibir salarios dignos, porque de lo contrario, universidades se mantendrán estancadas en el tiempo.
“Hemos dicho en reiteradas oportunidades como nos preocupa que la Academia se vaya desmantelando poco a poco, en vista que los salarios no son atractivos, hay una renuncia masiva de profesores, concursos desiertos; cuando en otras oportunidades era muy atractivo trabajar en las universidades, porque habían buenos salarios y existía una seguridad social”, sostuvo.
Denunció que el gobierno se había comprometido a cancelar los pasivos laborales antes de finalizar el primer trimestre de 2012 y hasta la fecha no se han concretado los pagos.
“Ya finalizó el segundo trimestre de 2012 y no hemos tenido respuesta, simplemente atañen la responsabilidad a las universidades por presuntos errores en la data, sin embargo, todos los instructivos fueron tomados en cuenta y nadie nos da respuesta de nada”, dijo.
Hora cero en puerta
Rubén Darío Albornoz presidente de la Asociación de Trabajadores de la UCLA (ATAUCLA), informó que la hora cero está en puerta y no descartan que el inicio de actividades en el mes de septiembre no se cumpla, en caso que el gobierno no tome en cuenta las exigencias de los universitarios.
“Los universitarios decidimos tomar la calle y entregar un documento en la Asamblea Nacional para solicitar que sea incluido en el presupuesto nacional del año que viene un presupuesto justo ya que tenemos cinco años con presupuesto reconducido y se cumplan con las exigencias de los trabajadores”, precisó.
Finalmente reiteró que de no cumplir con las exigencias, las universidades activaran la hora cero, situación que a su juicio, sería muy incomoda a un mes de las elecciones presidenciales del 7 de octubre.
Foto: Williams Toledo
