Con una inversión de 111 mil 781 bolívares fuertes, se construirá el espacio donde funcionará la Unidad del Dolor en el Hospital Universitario Pediátrico Agustín Zubillaga (Hupaz) de Barquisimeto, un proyecto que nació gracias al apoyo de laboratorios Novartis y el trabajo de la directiva de este centro asistencial, para atender a cientos de pacientes que necesitan cuidados médicos.
El doctor Jorge Gaiti, director del Hupaz expresó que con este nuevo servicio -que ya se aplica dentro del hospital desde hace varios meses pero que ahora tendrá un espacio propio-, se promueve un modelo de atención del paciente con dolor en los niveles de atención primaria.
Asimismo, responde a las necesidades de inclusión de horas de educación en dolor a nivel de pregrado en la escuela de medicina de la Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado (UCLA), así como también a nivel de postgrados de anestesiología.
“Este es un motivo de alegría para el Hospital Pediátrico. Se nos está cumpliendo un sueño que traíamos, que en este centro cada niño hospitalizado que requiera de un procedimiento quirúrgico y no quirúrgico reciba la mejor atención en no sentir dolor”.
Indicó que cumpliendo con su responsabilidad social Laboratorios Novartis hizo posible este servicio, que llega para satisfacer las necesidades del Hupaz.
“Estamos creciendo para mejorar la atención de los niños, con el apoyo de la empresa privada y facilitando tanto la construcción de la infraestructura como la dotación del área”.
Por su parte, Rafaela Pérez, coordinadora de la Unidad del Dolor, destacó que dicho servicio se encargará del tratamiento del dolor de una forma multidimensional, tanto crónico como agudo.
“Nuestro personal está capacitado para atender al paciente pediátrico, con especialistas en fisiatría, terapia intensiva, psiquiatría, servicio social, entre otros, para un tratamiento interdisciplinario”.
Una vez que comience a funcionar en 100% este nuevo servicio, se iniciará el proceso de captación de estudiantes para diplomados, formando así los especialistas que en un futuro pertenecerán parte de la Unidad del Dolor, nuevas generaciones de médicos que mantendrán activo y en funcionamiento este servicio.
Foto: Simón Alberto Orellana