En horas de la tarde ayer, Nelson Bracca, director del Centro Penitenciario de Centro Occidente (mejor conocido como Uribana) les anunció a las más de 200 personas que estaban apostadas en las afueras del centro penitenciario, que el conflicto estaba solucionado. Duró cinco días.
Se autorizó el pase de paquetes y las visitas a los familiares, así que se estima que el día de hoy las actividades se reanudarán con total normalidad en el centro penitenciario.
Reunión con autoridades
En horas de la mañana, tres pastores penitenciarios, una vocera por parte de los familiares y privados de libertad, así como una representante de los consejos comunales de la zona estuvieron en el despacho de Yanina Karabín, presidenta del Circuito Judicial del estado Lara.
También se encontraba Isabel Lameda, diputada y miembro de la Comisión Penitenciaria de la Asamblea Nacional, y Elba Iris Rodil, como representante de los Derechos del Pueblo.
En la reunión, que tuvo una duración de dos horas, tocaron temas como el maltrato hacia los familiares a la hora de ingresar al penal. Así mismo las agresiones que sufren las personas de la comunidad que no tienen que ver con el penal cuando en este lugar tienen problemas.
El punto que más se tocó fue el de la intervención y en ese momento Karabín manifestó que eso no se tenía previsto, pues hasta ahora a ella no le habían notificado medidas al respecto.
Por otra parte, el vocero principal de la población se pronunció al respecto y manifestó que una medida de 15 días de sanción por hechos violentos era algo ilógico, pues en ninguna ley está establecido que los privados de libertad deban ser sancionados con la interrupción de la visita o la comida tras presentarse un hecho violento. Al final, cesó el conflicto.
Foto: Elías Rodríguez