Si usted utiliza el distribuidor El Ujano, en el sentido este-oeste, fíjese en el pequeño derrumbe que existe apenas incorporándose a la avenida Circunvalación Norte.
Con las lluvias de los últimos días, la tierra ha cedido y cae sobre el muro de contención que protege a la estructura vial. No obstante, una tragedia podría ocurrir para las personas que circulan debajo del elevado, si las enormes piedras terminan de caer a la avenida que conduce al Monumento al Sol o hacia El Cercado, según el sentido escogido.
Los vecinos de El Ujano y de urbanizaciones privadas, ubicadas en los alrededores del distribuidor, han advertido a las autoridades, sólo que no ocurre la debida atención. Temen que tanto en la avenida Circunvalación, como en la calle debajo del puente, se produzca un accidente automovilístico a causa de dicho derrumbe.
Durante las noches, el riesgo es peor, de hecho, varios carros se han deslizado, estando a punto de caer al precipicio. Eligio Medina, luchador social de El Ujano, declaró que las irregularidades en el asfalto han sido expuestas por los vecinos ante la Empresa Municipal de Infraestructura y Conservación del Ambiente (Emica) sin obtener beneficio alguno. Crece la preocupación y también se multiplican los peligros sobre el asfalto.
Hace dos semanas, un grupo de familias del sector, con una torta, recordó el cumpleaños número ocho de los huecos, haciendo alusión a la desidia oficial que los afecta. Están cansados y sin confianza. Ni siquiera las protestas en vías públicas sirvieron a lo largo de estos años para obtener una rehabilitación vial integral.
“No es posible que en la parroquia Santa Rosa, donde habita la mayoría de las autoridades de la ciudad, exista tanto abandono, como es el caso de El Ujano. El daño de las vías nos afecta a todos porque si bien somos nosotros quienes más la utilizan, una vialidad destrozada es una mala referencia de Barquisimeto. Exigimos mejoras para la comunidad, de lo contrario, seguiremos sufriendo calamidades”, dijo Medina.
El asfalto se perdió
También debajo del Distribuidor El Ujano, ocurrió un bacheo por parte de la Alcaldía de Iribarren, pero al poco tiempo el pavimento volvió a agrietarse y sólo se observan huecos.
Los residentes de la zona se preguntan cuál es la calidad del material que utilizan para rehabilitar la vía, considerando que en menos de un año el caos volvió a aparecer.
El paso constante de las unidades de la Ruta 12 y de algunas cargas pesadas que se incorporan desde la vía El Cercado, se dificultan por las condiciones.
El pavimento, además de los daños que presenta, ya sea por la mala calidad del bacheo o por el paso excesivo de unidades pesadas, se agrava con el bote de aguas blancas que existe justo en el semáforo.
Fotos: Jairo Nieto
