Vecinos de Las Cuibas, una comunidad de la parroquia Agua Viva, protestaron para exigir a los concejales «hacer cumplir la norma de adjudicación del terreno para poder desarrollar el proyecto comunitario».
Con pancartas que identifican el terreno en litigio como un bien de la comunidad, los manifestantes cerraron la Avenida Terepaima parcialmente por espacio de dos horas, justo frente al solar supuestamente invadido por unas cuatro familias que lo custodiaban.
Pidieron papeles del predio
Ingrid Rivero, vocera de contraloría social de la organización comunitaria de La Cuibas, señaló que durante la gestión del gobernador Luis Reyes Reyes, el Gobierno regional adquirió una hectárea de terreno en Las Cuibas con el propósito de construir un espacio para albergar a los médicos cubanos, áreas deportivas, recreativas, educativas y de salud.
-Los consejos comunales de la referida localidad, temiendo nos invadieran el predio, permitieron que una pareja de vecinos vivieran en una infraestructura existente como custodios, pero exigimos, tanto a la Gobernación de Lara como al Concejo Municipal, nos entregue formalmente las infraestructuras así como el terreno para poder ejecutar los proyectos sociales».
En el olvido
Por su parte Helvecia Giordano, vocera del consejo comunal de Las Cuibas I, dijo que hace un año esa organización sostuvo una reunión con representantes de la Gobernación de Lara y la Autoridad Única de Palavecino, a objeto de plantearles la necesidad del traspaso del predio, pero la situación quedó en el olvido.
Por parte del municipio, el escenario es más sombrío. Hasta que el Ejecutivo no defina la acción, la municipalidad se ve atada de manos.
Resaltaron que permanecerán en el lugar hasta obtener respuestas efectivas.
Somos propietarios de los terrenos
Wendy Yépez, Yeison y Ramón Riera, abordaron el equipo de prensa de este medio de comunicación, un poco alterados, por la manifestación que se desarrolló frente al predio que ocupan.
Declararon ser los dueños del solar, pues «estamos viviendo aquí desde hace 13 años, por eso tenemos derechos de sobra.
-Desde que la dueña de las bienhechurías le vendió al Estado, nosotros habitamos y mantenemos el terreno, recalcaron.
Esgrimieron que los consejos comunales quieren tomar el predio «y lanzarnos a la calle a vivir en ranchos. No lo aceptaremos ni les permitiremos la entrada».
Alegaron tener un contrato de arrendamiento expedido por la municipalidad, «lo cual nos prueba que somos los dueños».
-Ellos tienen terrenos de sobra en otro sitio para construir su Simoncito, CDI y parques.
Aclaran que no son invasores y tampoco están metiendo a otras familias.
Fotos: Luis Alberto Perozo Padua